Jesús Arellano entiende que antes del lucimiento personal está el beneficio del equipo, por lo que a pesar de que la lesión de Jared Borgetti le podría abrir la oportunidad de jugar, prefiere no adelantarse y trabajar como el resto de sus compañeros.
GOETTINGEN, ALEMANIA
El Cabrito asegura que se encuentra al cien por ciento en el aspecto físico, además de que "me siento bien entrenando y sólo espero tener la oportunidad de jugar". El delantero nacional aseguró que en estos momentos es difícil hacerse de un lugar en el equipo tricolor, "porque los compañeros están haciendo las cosas muy bien, así que mientras no juegue los apoyaré para que sigamos como hasta ahora".
Agregó que las circunstancias del partido ante Angola, en las que el rival tendrá le necesidad de atacar a México, serán apropiadas para que la ofensiva nacional encuentre los espacios necesarios para sacar provecho de eso.
"Ellos son un equipo fuerte físicamente, pero desordenados a la defensiva. Habrá que explotar eso y con nuestra calidad se hará un buen futbol para ganar el partido", comentó el atacante. "El equipo se está preparando física y mentalmente para enfrentar a Angola y obtener la segunda victoria".
Arellano mantiene la esperanza de poder jugar en su tercer Copa del Mundo. La emoción que le produce pensar en participar nuevamente con la selección es tan grande que se prepara de la mejor manera posible para cumplir con ese objetivo.
"Si se requiere que juegue, estoy en condiciones para hacerlo", agregó el Cabrito, quien finalizó: "Eso lo decide Ricardo, pero si no es así apoyaré al equipo".