El 'subcomandante' rechazó que el movimiento zapatista haya tenido alguna
injerencia en el conflicto del miércoles pasado en San Salvador Atenco.
México, (EFE).- El "subcomandante Marcos", líder del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), exigió hoy a las autoridades mexicanas que "desactiven el conflicto" originado hace días en San Salvador Atenco y libere a los más de 200 detenidos.
"Marcos" aprovechó su intervención en el noticiero Primero Noticias de la cadena Televisa para hacer un llamamiento a la opinión pública a fin de exija al Gobierno que los implicados en el caso sean puestos ante el juez formalmente y deslindó al EZLN de organizar el enfrentamiento.
Sin armas, vestido con su atuendo habitual y fumando en pipa, "Marcos" dijo que los disturbios ocurridos los días 3 y 4 de mayo en San Salvador Atenco, municipio del estado de México cercano a la capital del país, podía aún ser desactivado.
"Nosotros queremos llamar a la gente (...) a que exija del Gobierno Federal, estatal, municipal, que esa gente sea atendida y que los detenidos y desaparecidos sean presentados. No es posible que se mantenga esa situación y que hagamos como 'bueno, cada uno se queda con lo suyo y se separa'", manifestó Marcos.
En su primera entrevista en directo por televisión en varios años, el portavoz del EZLN se centró en los disturbios de la semana pasada en el conflicto municipio de San Salvador Atenco, que dejó a un joven muerto y más de medio centenar de heridos, varios de ellos policías.
Afirmó que las autoridades habían actuado por "venganza" en una especie de ensayo como cuando "entra el Ejército israelí a los campamentos de refugiados palestinos: hay que acabar con todo".
"Nosotros no estamos detrás de nada. Estamos en 'La otra campaña' que está enviando un mensaje claro: tenemos que apoyarnos unos a otros. No podemos dejar que nos sigan golpeando, a unos por un lado, a otros por otro", aseguró "Marcos" al rechazar cualquier vinculación del EZLN con la revuelta como han dicho diversos medios.
En el programa mostraron a "Marcos" escenas de más de una decena de policías golpeando con saña a un hombre desarmado, y de habitantes de Atenco armados con machetes, haciendo lo mismo con un agente desfallecido.
"Marcos" dijo del segundo caso que es una muestra de "la furia de la gente", que respondía "a una agresión", paradójicamente, de las fuerzas del orden.
"No se puede equiparar la violencia que ejercen los pobladores civiles con la violencia del Estado. Está completamente fuera de proporción", agregó "Marcos".
El líder encapuchado también dijo que Andrés Manuel López Obrador "va a ganar" unos comicios presidenciales en los que se disputa el poder con el conservador Felipe Calderón y Roberto Madrazo, del Partido Revolucionario Institucional (PRI), como principales rivales.
"Va a haber una cierta esperanza de que la situación va a cambiar, luego va a volver la desilusión, y entonces es cuando se necesita otra cosa", añadió.
Al ser pregunta si le gustan las primeras planas y con este conflicto de Atenco regresa a ellas, "Marcos" lo negó y dijo que en todos estos años había perdido "mucho sex-appeal" (atractivo sexual).
Finalmente aseguró que el EZLN no ha buscado conflictos en "La otra campaña", como se denomina la gira nacional que "Marcos" comenzó en enero, y que basa sus apoyos en su "autoridad moral".
"Estamos insistiendo en la vía política", sostuvo el líder zapatista, quien defiende la necesidad de construir un frente de izquierda independiente de los partidos que renueve y reforme en profundidad el país.
Preguntado sobre qué futuro imagina para sí, "Marcos" contestó que se ve "muerto de bala" y sepultado "con pasamontañas".
Sobre la reaparición de "Marcos" en medios masivos -hoy el diario "La Jornada" publica una entrevista con él-, el portavoz del presidente Vicente Fox, Rubén Aguilar, señaló que era una prueba de la libertad de expresión que existe en el país.