EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- Porque los trabajos arqueológicos pretenden recuperar la memoria de los antiguos habitantes, la Dirección Municipal de Cultura y el Museo Regional de La Laguna proponen la muestra denominada La Naturaleza y el Hombre: Colima, un Escenario Bajo el Volcán.
La exhibición está seccionada en seis cédulas que reúnen una colección de creaciones elaboradas por los antiguos habitantes del valle de Colima, lugar que se caracterizó por el desarrollo de una práctica cultural conocida como tumbas de tiro, dentro de las que se encontraron ofrendas elaboradas en barro de dos tipos: las figurillas huecas y las sólidas.
La muestra será presentada el 11 de octubre, a las 7:00 de la noche, en el Canal de la Perla con acceso por la calle Cepeda, según anunciaron representantes de las instituciones convocantes.
La tradición consistía en palabras de Cristina Matouk, subdirectora de la dirección de Cultura, ?en poner a los difuntos en sus tumbas junto con ofrendas como parte de sus ritos?, que si bien, buena parte de estas ofrendas desaparecieron en el transcurrir de los siglos (principalmente los textiles, las tallas en madera y los objetos de palma), las representaciones en barro, piedra y ocasionalmente en concha de caracol y hueso han permanecido como testigos de vidas pasadas.
Ana Sofía García Camil, directora del museo, informó que la obra consta de 22 piezas que datan desde el 400 a. C. y hasta el 500 d. C. ?Son 22 piezas pequeñas que manejan tres áreas diferentes: Entre Plantas y Animales: La Naturaleza, La Naturaleza Humana y La Naturaleza Divina, cuyo guión museográfico fue realizado por los arqueólogos Ángeles Olay, Fernando González y Laura Almendros, adscritos al Centro INAH-Colima?.
La exposición explica que las tumbas de tiro se realizaban como un conjunto de usos y costumbres elaborados alrededor de la muerte, que consistía físicamente en bóvedas huecas excavadas dentro del subsuelo, a cuyo interior se accedía a través de un tiro o pozo de forma casi siempre circular.
Según explicó García Camil, las piezas que estarán en exposición son pequeñas pues tienen medidas aproximadas de 50 ó 60 centímetros de alto y mostrarán imágenes cotidianas, en donde las figuras más representadas son de calabazas y jitomates, así como el xoloescuintle (perro que acompañaba y cuidaba a su amo), o el teochichi (perro cebado que servía de alimento).
En la sección Naturaleza Humana se describirá la manera en que los antiguos alfareros de Colima lograron desarrollar el arte como reflejo de sus rituales y normas de belleza.
La tercera y última sección se titula Naturaleza Divina, y en ella se podrá apreciar el símbolo de la relación entre el hombre y la divinidad, que refleja la recurrente presencia de los dioses y espíritus en las figuritas.
Idoia Leal, representante del Canal de la Perla, reiteró la importancia que posee este recinto históricamente y ahora como espacio de exposiciones: ?La muestra será montada en el interior de lo que fue la obra hidráulica más antigua de Torreón, que ahora tiene una vocación cultural y es un sitio al que todo el público tiene acceso?.