Praga, (EFE).- La pasada nochevieja murió en la República Checa la mujer más mayor del país, Frantiska Novotna, tras alcanzar la edad de 108 años.
Novotna nació en el año 1897 en Novy Syrovice, una localidad al sureste de la nación centroeuropea, que entonces formaba parte de la monarquía austro-húngara.
Durante su larga vida experimentó ocho regímenes políticos distintos: la monarquía Austro-Húngara, la Primera República checoslovaca, la Segunda República (tras la anexión de los sudetes por Hitler), el Protectorado alemán, Checoslovaquia, la República Socialista Checoslovaca y, la República federativa Checo y Eslovaca, hasta la fecha de su muerte, la República Checa.
Debido a su frágil salud, desde junio pasado vivía en un hospicio, donde en septiembre celebró su último cumpleaños, y antes había residido doce años en una casa de jubilados.
Novotna, que durante su vida no padeció ninguna enfermedad seria, era madre de tres hijos y trabajó como campesina, llevando siempre una existencia humilde.