Una asombrosa escena presenciaron algunos habitantes de un poblado de Nombre de Dios, al ver que su vecino, Pedro Guevara Domínguez, de 81 años, había muerto y presentaba quemaduras de tercer grado en el 100 por ciento de la superficie de su cuerpo, según comentaron los testigos a los agentes de la Procuraduría que se trasladaron hacia ese lugar para tomar fe de los hechos.
El sábado por la tarde, los vecinos del poblado San José de las Corrientes, en el municipio citado, se percataron de que del domicilio de don Pedro salía una estela de humo, por lo que sin pensar forzaron la puerta y entraron, observando el cuerpo del mencionado sin vida y que además presentaba quemaduras de tercer grado en todo su cuerpo.
La noticia rápidamente se extendió por el pueblo, diciendo que el sujeto había muerto quemado, provocando que un habitante de ese lugar llamara a la autoridad correspondiente para que se hiciera cargo de la situación.
Los elementos de la Procuraduría trasladaron el cuerpo a la capital del estado, donde le practicaron la autopsia de rigor, en la que el resultado señaló que el deceso se produjo por un infarto agudo al miocardio.
Las investigaciones que se realizaron en torno a esta muerte llevaron a los elementos de la Procuraduría a las declaraciones de los familiares y vecinos, quienes señalaron que Pedro fumaba mucho, casi un cigarro tras otro, descartando toda posibilidad de que el fuego se haya provocado intencionalmente.
Las deducciones a las que llegaron los peritos es que de acuerdo con la posición en que se localizó el cadáver y su adicción al tabaco, Pedro pudo estar fumando en su cama y en ese momento le dio el infarto, dejando caer el cigarro en el colchón, por lo que se produjo el incendio que acabó prácticamente con la piel del hoy occiso.