Beneficios| Las manzanas y las frutas cítricas como el limón, la naranja y la toronja no solamente son ricos en fibras, sino que también son excelentes fuentes de pectina, una fibra soluble.
EL UNIVERSAL
MÉXICO, D.F.- Consumir fibra es lo actual, pero no tanto por moda, sino por salud y bienestar. Es un ingrediente fundamental para el buen funcionamiento del organismo.
Esta siempre ha existido de manera natural en los alimentos, pero fue en 1960 cuando el doctor Denis Burkitt y otros médicos británicos comenzaron a interesarse por sus beneficios, a partir de que se descubrió que los habitantes rurales en África no sufrían ciertas enfermedades comunes en las zonas urbanas del continente y en los países occidentales.
Gracias a estas investigaciones se supo que los alimentos ricos en fibra retienen mejor los líquidos y ayudan a controlar el estreñimiento y las enfermedades cardiacas, la hipertensión, la diabetes y la diverticulitis.
Además, en los últimos años se han descubierto otros posibles beneficios dietéticos de la fibra, convirtiéndose en un elemento de gran importancia para la buena nutrición.
Sus beneficios se pueden resumir en:
* La moderación del apetito y mejora de la digestión.
* El equilibrio de la función del aparato digestivo, previniendo el estreñimiento y reduciendo el riesgo de sufrir hemorroides.
* Eliminar grasas y restos de alimentos que llegan a alojarse en el trayecto digestivo.
* Regular la absorción de los azúcares y controlar la obesidad.
* Prevenir padecimientos como el síndrome del intestino irritable, cáncer de colon y de mama, enfermedades cardiovasculares, nivel elevado de colesterol, diabetes y cálculos biliares.
¿Dónde encontrarla?
En frutas, vegetales, granos, nueces y legumbres. Las manzanas y las frutas cítricas como el limón, la naranja y la toronja no solamente son ricos en fibras, sino que también son excelentes fuentes de pectina, una fibra soluble.
Actualmente muchos productos alimenticios están adicionados con fibra.