EDITORIAL Caricatura editorial columnas editorial

Foro ético mundial

Juan de la Borbolla

Una de tantas manifestaciones patentes del fenómeno de la globalización en la que está inmersa la humanidad contemporánea es la creación de foros internacionales de discusión de grandes problemas mundiales a los que concurren personas, sociedades intermedias de la sociedad, también denominados por otros: Organismos No Gubernamentales; representantes de distintos gobiernos e instituciones representativas de organismos internacionales y de corporaciones trasnacionales.

Así conocemos por ejemplo foros de importancia económica y social como lo es el que año con año se reúne en la ciudad suiza de Davos, o aquel otro que se lleva a cabo en la ciudad de Portoalegre en Brasil, el primero representativo de los intereses del gran mundo desarrollado y el segundo integrador de intereses de comunidades que se rebelan contra el neoliberalismo y el mismo concepto globalizador, sin entender que la reunión misma está fundamentada en el fenómeno comunicacional de la globalización.

Cito estos foros con independencia de los que la propia ONU organiza con cierta periodicidad en relación con temas como los de la alimentación, la ciencia, la cultura, el crecimiento demográfico, la condición de la mujer o los problemas ambientales y climáticos y en los que convoca a gobiernos, ONGs, e individuos concretos conocedores del tema a discutir.

Del día 27 al 29 de enero de 2006, nuestra patria fue anfitriona de otra naciente reunión internacional dedicada a la consideración de temas específicos para el bien común supranacional. La pretensión del Foro Ético Mundial fue proponer y ratificar a la Ética, como norma fundamental de conducta en el espacio público nacional e internacional.

En los temas de Política y Participación, Familia y Vida, Juventud y Retos del Futuro, Educación, Cultura y Ecología y Medios de Comunicación Social y Esparcimiento. Las sedes de estos foros de discusión fueron Cuernavaca, Guadalajara, León, Puebla y Querétaro respectivamente y las conclusiones de las ponencias, discusiones y aportaciones que se generen en cada módulo temático se integraron en un documento final que presentó una propuesta de adhesión, compromiso y práctica eficaz de tales principios para toda la comunidad contemporánea, por parte de los organismos intermedios participantes de dicha reunión mundial, el cual fue leído en la Ciudad de México en presencia del secretario de Gobernación el pasado domingo 29 de enero.

En un mundo a veces tan pragmático, relativista, hedonista e inmediatista como el que nos toca vivir, donde el exponente del éxito para personas y sociedades es la capacidad de comprar y consumir hasta lo superfluo, el que se den cita una serie de intelectuales, humanistas, personas de la sociedad civil y organismos intermedios de la sociedad en torno al tema central de la ética en cada una de las actividades en las que se dividió el Foro, creo que es síntoma de que hay todavía muchas esperanzas vivas en el futuro más justo y solidario de esta humanidad independientemente de banderías ideológico políticas tan bien especificadas pero siempre exclusivamente materialistas, como las que se reúnen en Davos o en Portoalegre.

Leer más de EDITORIAL

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de EDITORIAL

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 196714

elsiglo.mx