EL UNIVERSAL-AEE
MÉXICO, DF.- Las fresas, sabrosas y frescas, son ideales para estos días de mucho calor, sobre todo porque comerlas beneficia al organismo. De acuerdo con la American Dietetic Association, con sólo comer unas cuantas se ayuda a equilibrar la dieta diaria.
Por ejemplo, está probado que la mayoría de las personas no consume la fibra suficiente, sólo ingiere de 12 a 15 de los 20 o 35 gramos recomendados.
Una porción de fresas proporciona tres gramos de fibra dietética, que ayuda a bajar el nivel de colesterol en la sangre y mantener un sistema digestivo saludable, reduciendo el riesgo de enfermedades del corazón o cáncer de colon.
Estudios epidemiológicos han reportado que las personas que comen cantidades mayores de fibra tienen un riesgo menor de tener enfermedades cardiovasculares e hipertensión.
Además aportan potasio, un nutriente que balancea electrólitos, alivia las contracciones musculares y mantiene una presión sanguínea saludable.
Ocho fresas medianas proveen de 210 miligramos de potasio, otras fuentes pueden ser plátanos, naranjas y uvas.
La vitamina C es un potente antioxidante que se encuentra en las fresas, naranjas, uvas, jitomate y papas. Dietas ricas en vitamina C están asociados a probabilidades bajas de cáncer en esófago, estómago, colon y pulmones.
Las fresas son una excelente fuente de vitamina C, de hecho, ocho fresas medianas proveen 84 miligramos de ella, o lo que es lo mismo 93 por ciento de lo recomendado diariamente.
El ácido fólico es un componente de la vitamina B y se halla en fresas, naranjas y en vegetales y también en suplementos vitamínicos. La dosis diaria recomendada es de 560 microgramos; desafortunadamente, la mayoría de los mexicanos no la consumen.
Es especialmente importante que mujeres embarazadas tomen mucho folato (ácido fólico), ya que reduce las probabilidades de defectos prenatales. Ocho fresas medianas contienen seis por ciento necesario de este elemento.
El folato ayuda a deshacer los aminoácidos en la sangre, con lo cual se previenen enfermedades coronarias, y ataques cardiacos.
Reina de los postres
En Primavera y Verano, la fresa es la reina indiscutible de la repostería.
Con azúcar, nata o bañadas en chocolate, con zumo de naranja, en tartas, helados, mousses, mermeladas, bizcochos y gelatinas.
Los italianos, por ejemplo, la usan mucho en ensaladas. Es una fruta que se mantiene fresca durante muy poco tiempo, por lo que debe ser consumida lo antes posible una vez que llega a nuestra cocina.
Pueden guardarse en la nevera, pero nunca en el congelador. Y es recomendable lavarlas con vino blanco, mejor que con agua, porque así conservan intactos su aroma y sabor.
Anuncian el buen tiempo
Deliciosas, fragantes y jugosas, las primeras fresas de la temporada nos anuncian el fin del Invierno y la llegada del buen tiempo.
-Fuente importante de antioxidantes y minerales, esta fruta corona con su color rojizo los más suculentos postres.
-A lo largo de los siglos, la aparición de las primeras fresas era para los hombres el signo inicial de la llegada de la Primavera.
-Con los últimos coletazos del Invierno, los hielos se derriten y las faldas de los montes se visten con el color rojizo de esta hermosa fruta, todo un lujo para el paladar y la vista.
-Originarias de los Alpes, las fresas fueron descubiertas por los romanos, para quienes eran un alimento privilegiado y exclusivo de la clase noble.
-Actualmente, su cultivo se encuentra extendido por muchos países, siendo España uno de los primeros productores mundiales de fresas.
-Aunque existen más de 600 variedades de fresas, para su comercialización se dividen en dos grandes grupos: las de fruto grande o fresones, y las de fruto pequeño o fresas propiamente dichas.
FUENTE: Agencias