El reflujo gástrico es uno de los peores tormentos que puede padecer una persona.
En el momento menos esperado, en el trabajo, en medio del tránsito o una junta importante, e incluso en el sueño más profundo, el reflujo gástrico es uno de los peores tormentos que puede padecer una persona. Dura poco cada ataque, pero suele repetirse y debe ser frenado con una barrera médica efectiva.
Hay quienes dejan pasar este problema porque consideran que es simplemente producto de lo que comieron unos minutos antes, y algo de cierto hay en esta creencia. Los expertos en salud dicen que la enfermedad por reflujo gastroesofágico consiste en el regreso anormal de los alimentos e incluso de ácidos del estómago a través del esófago.
Molestias
Lo real es que es un mal que aqueja a millones de personas en el mundo, provocando una sensación de ardor y malestar continuos, debido a que los músculos que rodean la válvula (esfínter esofágico inferior) del esófago se debilitan, al permitir el paso del ácido del estómago al esófago, originando un daño inminente en el revestimiento esofágico.
Entonces llegan los ardores y las ansias de conocer un bombero interno que apague ese fuego. Los especialistas indican que cuando estos síntomas son frecuentes y no se tratan con una ayuda médica oportuna, pueden causar problemas respiratorios, ulceración e incluso cáncer en el esófago.
Advierten que otra complicación es la inflamación causada en el estómago que llega a lesionar las paredes internas, ocasionando dolor, acidez gástrica y hasta sangrado.
Gastritis
José Luis Cabero, director del Centro de Investigación y Desarrollo de los Laboratorios AstraZeneca en Molndal, comenta que existen diversos tipos de gastritis: erosivas, no erosivas, agudas y crónicas, y se considera que la presencia de la bacteria Helicobacter Pylori es la causa principal de este padecimiento.
Llama la atención sobre el hecho de que son muchas las causas de las enfermedades relacionadas con el ácido, y que este tipo de patología, además de ser funcional, puede reflejar trastornos sicosomáticos y hasta orgánicos.
Medicamentos
Comenta que para prevenir la aparición de este tipo de síntomas y controlar las secreciones de ácido, los medicamentos conocidos como inhibidores de la bomba de protones (IBP's), como nexium (esomeprazol), tienen mecanismos de metabolización diferentes que hacen que este bloqueo se produzca con una mayor prontitud y generalización.
Este fármaco -dice- ha demostrado una mayor rapidez de acción, lo que significa que el control del ácido con este medicamento es mayor; en definitiva, tiene características que lo hacen un fármaco de primera línea, obteniendo resultados satisfactorios para el paciente. El extraordinario soporte de investigación lo ha hecho un fármaco reconocido a nivel mundial.
Advierte que los riesgos de no seguir un tratamiento eficaz desde los primeros síntomas y aceptarlos como algo habitual, empeoran el malestar y prolongan su tratamiento, pues se retrasa el buen control a la acidez que se consigue con una atención médica oportuna.
Es por esta razón que la incidencia en este tipo de padecimiento sigue siendo muy alta y, actualmente, ya son 400 millones de personas a nivel mundial que han desarrollado gastritis, de las cuales 10% padece de reflujo gástrico.