EL PAÍs
Washington, EU.- El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, visitará mañana viernes por primera vez Vietnam, lo que le convierte en el segundo mandatario norteamericano en pisar la nación comunista fundada tras el final de la guerra -1975- con la salida de las tropas americanas.
Con el país bajo el peso de la polémica guerra de Irak, un Bush tocado por el reciente resultado electoral -que ha puesto el Congreso en manos de la oposición demócrata- abandonó el martes Washington en un viaje por Asia de seis días, durante los cuales hizo una parada técnica en Moscú para luego dirigirse a Singapur, Vietnam e Indonesia.
La Casa Blanca asegura en un comunicado que quiere aprovechar el viaje para ?contribuir al crecimiento económico de la zona y estimular el comercio, así como alentar los esfuerzos en la lucha contra el terrorismo y contra enfermedades como la gripe aviar?. Pero Bush viaja hasta Vietnam sin llevar bajo el brazo la prometida aprobación del Tratado de Libre Comercio -TLC- con ese país. Los demócratas no quisieron ofrecerle esa victoria y no aprobaron la Ley necesaria para dar ?luz verde? al tratado.
Los republicanos arañan el tiempo y ayer todavía contaban con reunir una mayoría simple que les permitiera una nueva votación para que se pasase la medida y su jefe pudiera hacer el anuncio en Hanoi durante el viaje. La visita de Bush al antiguo campo de batalla enemigo se enmarca dentro de la cumbre del foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico que tiene como sede Hanoi. Pero el tumultuoso pasado entre ambos países será un recuerdo continuo para el presidente.
Desde los mil 800 soldados desaparecidos en combate fruto de la larga contienda, hasta las estatuas victoriosas del líder comunista del norte victorioso Ho Chi Minh, que recordaran el fracaso militar americano en suelo vietnamita y sin duda despertaran comparaciones con la sangría que se vive en Irak. Hoy, en la actual capital de Vietnam, Hanoi, la discoteca de moda se llama Apocalypse Now.