París, (EFE).- La difusión en los medios de comunicación de las imágenes grabadas en un celular de la paliza propinada a una profesora por uno de sus alumnos llevó a la justicia a detener de nuevo al agresor y abrió el debate sobre el fenómeno de la violencia gratuita para difundirla en Internet.
En las imágenes se ve al estudiante, de 18 años, lanzar una silla contra la profesora, de 34, arrinconarla contra la pared para darle puñetazos y luego tirarla al suelo y seguir dándole golpes.
El ataque se produjo en un instituto de Porcheville, en Yvelines, uno de los departamentos de la región parisiense, y fue grabada por un compañero de clase del agresor con su teléfono móvil.
El estudiante, que había quedado en libertad entonces pese a que no negó ni minimizó los hechos cuando le arrestaron, fue detenido por segunda vez, después de que un periódico parisiense publicase las imágenes.
El joven había sido citado para comparecer el próximo 26 de junio ante un tribunal para ser juzgado por "golpes y heridas voluntarias" contra la profesora, que pudo desembarazarse de su agresor gracias a la ayuda de otros alumnos y docentes.
El fiscal de Versalles, Yves Colleu, reconoció que en este caso hubo "una mala apreciación de la fiscalía" en un primer momento, por lo que no descartó que se recalifiquen con carácter agravante los cargos contra el joven, quien comparecerá de forma inmediata ante un tribunal.
La policía busca ahora a la persona que grabó la paliza y a quienes difundieron el video, que está en manos de la policía.
Este fenómeno de grabar agresiones para luego ponerlas en internet fue detectado en las recientes movilizaciones contra el Contrato de Primer Empleo (CPE), donde alborotadores aprovechaban las manifestaciones para destrozar cosas o golpear a personas con ese objetivo.
