Agencias
MÉXICO, DF.- Hace cerca de un año, Emilio Azcárraga Jean, presidente de Grupo Televisa, anunciaba su interés por conquistar Europa, iniciando la aventura por España de la mano de un socio local. Hoy sólo faltan días para que uno más de sus deseos sea puesto en marcha. Con un mercado publicitario televisivo que crece a un ritmo anual de ocho por ciento y supera los 3.180 millones de dólares, España es un bocado apetecible para cualquiera. Especialmente para Azcárraga, hijo del legendario Tigre Azcárraga, quien desde hace tiempo está obsesionado con aumentar los ámbitos de acción de la empresa que heredó. De allí que suscribiera junto a importantes productoras españolas, en octubre, el consorcio Grupo Audiovisual de Medios de Producción, cuya denominación comercial es La Sexta, a través de la cual esperaba la concesión del gobierno de una cuarta licencia de televisión privada analógica. Sólo un mes después celebraban el haber ganado el concurso.
En la nueva compañía, a la que también se le otorgaron dos frecuencias digitales, participan Televisa con un 40 por ciento y las españolas Grupo Árbol, cabecera de Globomedia, y Mediapro con el 47 por ciento. Estas dos últimas se acaban de fusionar, convirtiéndose en el tercer grupo de la industria audiovisual en su continente. El resto de las acciones está dividido entre otras tres productoras.
La mexicana confía en que para 2010 habrá consolidado una audiencia del siete por ciento y estará en el 70 por ciento de los hogares españoles. Pero para el primer trimestre de este año las expectativas están en ver reflejada la nueva operación en sus resultados financieros. Y es que su entrada les permitirá no sólo adaptar programas de las conocidas productoras españolas, sino también usar las instalaciones de Televisa para producir contenidos en España y hacer coproducciones para el mercado hispano de Estados Unidos.