Agencias
LOS ÁNGELES, CALIFORNIA.- Con una gira por Europa que comienza esta semana, el grupo estadounidense Guns N? Roses buscará borrar diez años de retrasos creativos y controvertidos cambios en sus filas para reconquistar su título perdido de reyes del rock.
De la formación original que entre 1987 y 1993 vendiera unos 90 millones de álbumes, sólo permanece el cantante Axl Rose, luego de la partida del guitarrista Slash y del bajista Duff McKagan, a mediados de la década de 1990.
Los Guns son un producto del lado sombrío de Hollywood, el de los sin techo, los junkies (drogadictos) y las prostitutas. Sus primeras canciones reflejan un estilo de vida extremo, entre la violencia, el consumo de sustancias ilegales y las chicas fáciles.
"Teníamos la impresión de que eso no terminaría bien, pero no podíamos dejar de verlos", señaló Vicky Hamilton, primer agente del grupo surgido en 1985.
"Se decía que alguno de ellos moriría. Pero nadie falleció, es realmente sorprendente", agregó.
La brutal energía de la banda de Axl, que supo seducir en clubes californianos a un público cada vez más importante entre 1985 y 1986, llevó a que varias disqueras se interesaran. Finalmente terminaron por firmar con Geffen, productor de sus ídolos y modelos: el grupo Aerosmith.
El primer álbum de Guns, Appetite for Destruction (1987), cuya tapa fue censurada por tener una escena de violación, tardó en volverse conocido porque las radios se negaban a difundir sus canciones repletas de obscenidades.
Sin embargo, terminó superando los 18 millones de ejemplares en Estados Unidos. La aplanadora estaba en marcha. Durante seis años, el grupo llenaría estadios en el mundo entero, escandalizaría la moral estadounidense y convertiría a sus miembros en multimillonarios.
Entre el hard-rock endiablado y las baladas a veces grandilocuentes, los álbumes Use Your Illusion I y II fueron directamente en 1991 al primer y segundo lugar de la lista de éxitos musicales estadounidenses.
"Algunas personas pueden encontrar este disco chocante. Déjense de joder y váyanse a la góndola New Age", advertían las cajas de los discos en señal de provocación para los censores.
Pero, víctima de tensiones internas debidas a la fuerte personalidad de sus miembros y agotado por giras interminables, el grupo se anquilosó y entró en un largo letargo después de su quinto álbum, más que nada de corte punk, en 1993.
Desde entonces, sus admiradores esperan el famoso álbum fantasma Chinese Democracy, prometido desde hace cerca de diez años y calificado con ironía en 2005 por el diario The New York Times como el álbum más preciado del que jamás se haya tenido cuenta.
Mientras que el "renovado" Guns N?Roses de Axl Rose y sus músicos inició en España su gira europea de unos 30 conciertos, recientemente realizado con éxito en Nueva York, los expertos en "roseología" confían en que las presentaciones no se cancelen por destrozos como en 2002, cuando también creía que Guns hacía su regreso triunfal.
"Mientras que Axl Rose no deje de presentarse a los conciertos, todo va a estar bien", dijo Eric Romano, un canadiense experto en informática que administra desde hace unos 11 años un completo sitio en internet dedicado al grupo, mygnr.com.
Romano aseguró estar convencido de que el grupo puede reconquistar su corona.
"Para una mayoría de fanáticos, aunque los ex miembros no estén, mientras esté Axl siempre será Guns N? Roses", afirmó.
Robert John, fotógrafo de la formación de 1985 a 2002, no oculta sin embargo su nostalgia.
"Es un buen grupo, pero creo que no tiene la química de sus orígenes", se lamentó.