EL UNIVERSAL-AEE
WASHINGTON, EU.- La luna Titán de saturno pudo haber recibido rocas desde la Tierra con microorganismos en su interior, eyectadas desde nuestro planeta por un gran impacto de cometa o asteroide.
Rocas despedazadas arrojadas muy lejos de la superficie de la Tierra después de un impacto importante sobre nuestro planeta, habrían podido viajar hacia el Sistema Solar exterior de acuerdo a la revista New Scientist.
El trabajo sugiere que microbios terrestres en las rocas habrían podido en teoría aterrizar en Titán, la luna gigante de Saturno, pero si hubiesen podido sobrevivir una vez ahí sigue siendo un misterio.
El hecho que meteoritos provenientes de la Luna y de Marte han aterrizado en la Tierra confirma que los impactos de cuerpos en el Sistema Solar pueden lanzar fragmentos rocosos a otros planetas.
Estudios anteriores han sugerido que alguna forma de vida en las rocas habría podido sobrevivir a la explosión y lanzamiento, así como a la radiación y frío del viaje a través del espacio, por algunos millones de años. Alguna resistencia levanta la posibilidad de que la vida en la Tierra fuera sembrada desde el espacio, un concepto llamado panspermia.
Pero ahora, investigadores conducidos por Brett Gladman de la universidad de Columbia británica en Vancouver, Canadá, han analizado la situación inversa, en donde la vida en la Tierra pudiera haber llegado a otros cuerpos del Sistema Solar.
El equipo corrió modelos de computadora de impactos gigantes, estimando que cada uno enviaría cerca de 600 millones de rocas al espacio girando en una órbita alrededor del Sol.
Algunos de éstas alcanzaron velocidades relativamente altas, de más de seis kilómetros por segundo, suficientes para alcanzar a Júpiter y Saturno en alrededor de un millón de años. En las simulaciones, cerca de 100 rocas de cada impacto alcanzaron la luna Europa de Júpiter.