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Hacen divertida la política

Eunice Martínez Arias

Programas como El Privilegio de Mandar y los Peluches tienen sus raíces "históricas".

El Siglo de Torreón

Cuentan que hace 50 años, Jesús Martínez ?Palillo? llegaba a la carpa con un amparo en la bolsa del saco porque iba a parodiar al presidente en su función de comedia y ya sabía que lo iban a arrestar.

Hace 30 años, Manuel ?El Loco? Valdéz fue suspendido de Televisa porque osó llamar ?Bomberito? a Benito Juárez.

El domingo pasado, Alfonso Villalpando imitó en la televisión al ?Presi Chente Fox? y Raquel Pankowski a su esposa Marta Asegún que le dice ?pollito?, y millones de mexicanos rieron.

Hoy por la noche, Villalpando y Pankowski volverán a aparecer en ?El Privilegio de Mandar?, un programa que ha revolucionado la sátira política en México de la misma forma en que ?Palillo? lo hizo en los 40 y 50, los caricaturistas de La Jornada en los ochentas y personajes como Brozo o Andrés Bustamante en la última década.

La comedia ha intervenido desde siempre en la política nacional, dice Álvaro Cueva, especialista en periodismo televisivo. Pero, explica, en los últimos años éste ha sido más rudo por la creciente libertad que han gozado los medios, sobre todo en el actual sexenio.

Alfonso Villalpando coincide con Álvaro Cueva al asegurar que la política ha entrado a las emisiones cómicas a raíz de la salida del PRI del poder.

?Eso provocó una apertura causada también por muchos otros factores como la globalización, el deseo de los mexicanos por expresar lo que sienten y un cambio en la mentalidad de un partido que nos había gobernado a un Presidente que respetó el hecho de decir ?voy a dar mayor libertad??, dice el imitador del presidente Fox.

Ha sido un cambio notable. En el sexenio de Ernesto Zedillo los medios electrónicos gozaron cada vez más libertad para la parodia política pero hubo límites. El caso más notable fue el del programa Hechos de Peluche en TV Azteca, que marcó un hito en la comedia política con títeres representando a Cuatemochas, Chente Fax o el Jefe Ciego, pero nunca tuvo un peluche de Zedillo.

En las elecciones presidenciales de 2000, los candidatos a la presidencia acudieron con Adal Ramones para que el conductor se ?burlara? de ellos en Otro Rollo. Cuando Fox ganó las elecciones, llamó al programa para decirle a Ramones que fuera ?empacando sus cosas?. Pero ya presidente, Fox regresó al programa través de una entrevista para el segmento Flash Informativo.

Algo de historia

?La referencia más inmediata que tengo acerca de algún cómico que en el pasado hablara de política es Palillo, con sus ganas de ejercer esa libertad a costa inclusive de su propia vida?, dice Villalpando. ?Creo que uno de los méritos de Televisa es haber sido una pionera en este sentido de la sátira política como nosotros lo estamos haciendo con El Privilegio de Mandar?.

Pero Mauricio Castillo, cómico de Otro Rollo fue el primero en imitar a Fox, él mismo reconoce que pidió permiso para hacer su parodia.

?Sí era atrevido pues era la primera vez que se iba a hacer. Antes de que Fox fuera presidente sacamos un programa especial que se llamó ?El dos de julio el musical?. Hicimos sketches con canciones de musicales famosos. El primero en imitar a Fox fui yo, luego Andrés Bustamante, Los Peluches y ya finalmente los de La Parodia?, explicó Castillo.

Hechos de Peluche es el precursor inmediato de esta serie de parodias. Nacieron el cuatro de noviembre de 1996, cuando TV Azteca transmitió una tímida capsulita con muñecos de peluche que llevaba como protagonista al ex procurador panista ?Losamo Gracias?. La televisora pretendía continuar una tradición de programas políticos realizados con muñecos, cuyo primer antecedente fue Spitting Image, una emisión inglesa de principios de los ochenta.

?Los peluches fueron una innovación muy importante de TV Azteca porque recordemos que cuando nacen, Televisa no tenía nada parecido, fue un acto de valor sin precedentes además viniendo de una televisora pequeña?, agregó Álvaro Cueva.

Los Peluches fueron creación de Marco Antonio Flota, quien escribe columnas de humor político. Fue tanto su impacto que en 1997, cuando competía por la jefatura de gobierno del Distrito Federal, Cuauhtémoc Cárdenas pidió permiso para usar a su peluche, ?Cuatemochas?, en su campaña. Pero TV Azteca lo negó.

El Privilegio

Con el paso del tiempo, la apertura de otros espacios y el auge de otros comediantes como Andrés Bustamante El Güiri Güiri o Brozo y su programa El Mañanero, el horizonte de la comedia política se amplió y los Peluches dejaron de tener tanto impacto.

Pero fue El Privilegio de Mandar la emisión que cambió la forma de hacer parodia, pues por primera vez personajes de la vida política fueron imitados realmente. El programa empezó como un segmento en La Parodia, en 2004, pero pronto tomó vida propia y ocupó su propio espacio. A él fueron a dar cómicos como Raquel Pankowski, quien desde 2001 se hizo famosa en clubes nocturnos de la ciudad de México con sus devastadoras imitaciones de Marta Sahún de Fox.

Para Álvaro Cueva, se trata de una emisión histórica y más importante de los últimos años porque hubiera sido imposible que se autorizara su transmisión hace dos sexenios o tres.

?Es impresionante la manera en que esas personas critican a todos los políticos que les pasan por enfrente, el manejo de la actualidad noticiosa, de la caracterización física; realmente estamos ante un producto prodigioso. A lo mejor nos gusta, a lo mejor no, pero de veras dentro de la historia de la televisión mexicana tiene un valor muy especial?, dijo.

De acuerdo con la Encuesta Nacional en Vivienda de Parametría, siete de cada diez mexicanos han visto este programa, de los cuáles 66 por ciento tiene una opinión positiva de él y únicamente a nueve por ciento no le agrada.

De cualquier forma, millones de mexicanos sintonizarán hoy el programa, la última emisión antes de las elecciones, para ver la competencia entre Roberto y su ramo de flores tricolor, Felipe y su bolillo pegado al saco y Andrés Manuel y su gallito en el pelo.

Saturday Night Live, el pionero

Iniciado en 1975 por un grupo de cómicos en Estados Unidos, y sin muchas perspectivas de éxito, el programa Saturday Night Live fue el que marcó la forma de hacer parodia política.

Las imitaciones de los presidentes de Estados Unidos desde ese entonces han sido legendarias y varios actores se han consagrado por ellas, como Dana Carvey y su parodia de George Bush padre o Will Ferrell, quien logró una fiel réplica del hijo, con sus constantes tropiezos verbales.

Los Bush, Bill y Hillary Clinton, Ronald Reagan, Al Gore o John Kerry han pasado por las armas de los comediantes, que además realizan un noticiero satírico en cada una de sus emisiones.

Se ha dado el caso de políticos que cambian algunos de sus gestos o ademanes luego de ver cómo los comediantes de SNL los destrozan. El mismo Al Gore lo admitió en la elección de 2000.

El programa grabado se emite en Latinoamérica por la cadena Sony Entertaiment Televisión y en vivo en Estados Unidos por NBC.

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