Por Eunice Martínez Arias
El Siglo de Torreón
TORREÓN, COAH.- La gente rió y rió; unos se remolineaban en sus lugares, otros se tapaban la boca y otros más se limpiaban las lágrimas...
Ayer el Teatro Nazas se convirtió en el templo del buen humor pues albergó a dos de los mejores comediantes de México. El público lo sabía, por eso acudió en masa a las dos funciones que ofrecieron Rogelio Ramos y Teo González.
Ambos fueron los dueños del foro durante una hora. El primero en salir al escenario fue el lagunero, quien se dio vuelo contando sus típicas historias llenas de ?sorpresas? y de mucha picardía.
Tal como lo hace en centro nocturno y como lo ha hecho en sus presentaciones en los tres principales teatros de la Comarca, Rogelio Ramos narró algunas experiencias que ha vivido con su mujer, como cuando contó las peripecias que pasan en su casita de Infonavit ?está tan chiquita que cuando mi mujer corta cebolla todo el vecindario llora?.
Hombres y mujeres rieron sin parar, tras cada comentario del lagunero venía un aplauso generalizado y por supuesto, las típicas carcajadas.
?Mi vieja ya me trae que estoy gordo y el otro día me dijo que me iba a poner la dieta de la zona, yo dije ?¡ah pues está a toda ma... puros tortillones??.
La suegra, los hijos y los cantantes tampoco se libraron de los pícaros comentarios de Ramos, mucho menos Juan Gabriel, José José y la Tesorito, siendo con la imitación de esta última con la que dio por terminada su participación.
Pero casi de inmediato, apenas habiendo dejado el foro, entró ?al quite? Teo González. La ovación de la gente al ver al ?comediante de la cola de caballo? fue espectacular; él lo agradeció con chistes, chistes y más chistes.
?Estoy muy contento de estar aquí otra vez... cuando me dijeron ?Teo en Torreón quieren que regreses?, les dije ?¿al teatro?, y me contestaron ?¡nooo, lo que te robaste la última vez que estuviste!?.
Ni siquiera él mismo se salvó de sus comentarios mordaces, ?Yo sé que estoy feo... cuando nací estaba tan feo que el doctor en vez de cachetearme a mí le pegó a mi mamá... estaba tan feo que aprendí a caminar a los tres meses porque nadie me quería cargar...?.
A lo largo de una hora el comediante tapatío se refirió a la economía, la inseguridad y muchos otros problemas por los que está atravesando México, pero siempre con muy buen humor.
Al final tanto Rogelio como Teo recibieron un fuerte aplauso pues su misión de hacer reír a todos los asistentes había sido cumplida al pie de la letra.