En los últimos ocho años el número de candidatos hispanos en Estados Unidos aumentó un 46%.
AP
WASHINGTON, EU.- Candidatos de origen hispano competirán en 38 estados para diferentes cargos en las próximas elecciones y tienen posibilidad de incrementar su poder político, incluido el Congreso en Washington, dijo ayer una agrupación no partidista.
?Esto nos demuestra madurez y una gran participación latina en la política de Estados Unidos?, declaró Arturo Vargas, director de la Asociación Nacional de Funcionarios Elegidos y Designados (NALEO, por sus siglas en inglés). ?Los latinos van a tener en estas elecciones un impacto como candidatos y como votantes?.
Las elecciones se realizarán el martes siete y servirán para renovar toda la Cámara de Representantes, un tercio del Senado de 100 miembros y 36 de las 50 gubernaturas en la nación. Una renovación similar se producirá en las legislaturas estatales y otros puestos públicos no legislativos.
Vargas, hablando en una rueda de prensa, dijo que en 1998 había candidatos hispanos en 26 estados, número que ha crecido a 38, o un 46 por ciento de incremento, en apenas ocho años.
Los hispanos, sin embargo, son todavía un enigma demográfico para los políticos: representan el sector de mayor crecimiento en la población en Estados Unidos con el 14 por ciento, o unos 40 millones de personas, pero apenas están registrados para votar 5.7 millones o el cuatro por ciento del electorado estadounidense.
Más del 40 por ciento de los hispanos adultos no pueden votar debido a que son indocumentados o simplemente no quieren hacerlo.
?La marcha más importante que nos queda por delante es la marcha a las urnas?, dijo Vargas en una referencia a que centenares de miles de hispanos participaron este año en marchas callejeras para demandar una reforma de las leyes de inmigración.
Pero, según NALEO, los hispanos no consideran para estas elecciones la inmigración como tema de primera prioridad.
Vargas dijo que los hispanos que van a votar están más bien preocupados primero por la educación de sus hijos y luego por la economía, la guerra en Irak y finalmente la falta de reforma migratoria.
Indicó que ?según las preferencias electorales, los hispanos posiblemente aumenten en dos en la Cámara de Representantes y en uno en el Senado, con lo cual las sumas llegarían a 24 y tres, respectivamente?.
Aun cuando en el Senado ya existían tres hispanos este año, la última adición, el político de origen cubano Robert Menéndez, se debió a que el senador Jon Corzine le transfirió el asiento en enero luego de que Corzine fuera elegido gobernador de Nueva Jersey. Menéndez era entonces miembro de la Cámara de Representantes y es ahora el favorito para ganar en ese estado al republicano Thomas Kean.
En la Cámara de Representantes hay actualmente 22 hispanos, de los cuales 18 son demócratas y cuatro republicanos. El potencial avance a 24 se daría con dos victorias en las filas demócratas, según proyecciones de NALEO. Los cuatro hispanos republicanos seguirían, sin embargo, en sus puestos.
Los tres hispanos en el Senado representan un tres por ciento del total de senadores, y los 22 de la Cámara Baja un cinco por ciento.
En las legislaturas estatales, NALEO proyecta un avance de cuatro asientos en favor de los hispanos. En los 50 estados actualmente hay 178 legisladores hispanos, número que aumentaría a 182 en las elecciones.
El análisis de los potenciales avances en las legislaturas estatales también muestra el avance político de candidatos hispanos en los estados con una creciente comunidad hispana.
NALEO dijo que en nueve estados con tradicionales concentraciones de población hispana (Arizona, California, Colorado, Florida, Illinois, Nueva Jersey, Nueva York y Texas) se proyecta una pérdida neta de dos asientos.
Pero en otros estados donde hay una reciente concentración de hispanos habría una ganancia de seis asientos debido a que los hispanos ?han sentado las bases de un poder político propio?.