Santana y Martínez le quitan al Sao Paulo su condición de imbatible como local después de 19 años.
Agencias
Sao Paulo, Brasil.- Chivas del Guadalajara obtuvo su pase a octavos de final de la Copa Libertadores de América, luego de venir de atrás y derrotar como visitante 2-1 a Sao Paulo de Brasil, campeón reinante del torneo y del Mundial de Clubes, y de paso perdió la condición de imbatible que mantuvo en el Estadio Morumbí durante diecinueve años.
Aloisio adelantó al conjunto brasileño al minuto 33, sin embargo, Sergio Santana, al 45, y Diego Martínez, al 80, le dieron la vuelta al marcador, en un partido en el que jugó con un hombre menos desde el minuto 72 tras la expulsión de Omar Bravo.
Con este triunfo el cuadro mexicano llegó a diez unidades y es líder indiscutible del primer sector, mientras Sao Paulo, que vio rota una racha de 30 partidos sin derrota desde 1987 en su estadio, se quedó con seis.
Ya son pocos los equipos mexicanos que se plantan en suelo sudamericano con temor, una muestra clara la dio anoche Chivas que no se intimidó en la casa del campeón de la Libertadores y jugó de tú a tú, capaz de responder cuando parecía que Sao Paulo tomaba el control de las acciones al irse al frente en el marcador.
Ambos equipos se enfrascaron en duelo parejo en sus primeros 45 minutos, en los que Sao Paulo buscó aprovechar su localía sin lograrlo pues enfrente se topó con un Guadalajara que nunca se echó para atrás y afrontó el partido como se debía: con coraje, lucha y calidad futbolística.
El buen trabajo defensivo de los mexicanos, así como la poca claridad en sus embates, obligó a los brasileños a usar los disparos de media y larga distancia como su principal arma, con la que buscaron inquietar a Oswaldo Sánchez, quien en términos generales tuvo un primer tiempo tranquilo. Sólo una excelente ejecución de Aloisio fue capaz de terminar con esa solidez defensiva, al minuto 33, cuando el ariete sudamericano se encontró un rebote dentro del área y de volea con la pierna derecha puso el esférico cerca del poste derecho para romper con la paridad en el marcador.
La respuesta tapatía fue inmediata, ya que, cinco minutos después, Adolfo Bautista le robó el tanto del empate a Santana al intentar rematar un esférico servido por Bravo que llevaba como destinatario al ex jugador de Pachuca, que llegaba en una posición inmejorable.
Este error fue bien compensado por el ?Bofo? al minuto 45 cuando, por el sector de la derecha, mandó un centro a segundo poste a la llegada de Santana, quien ?martilló? su remate para batir al portero Rogerio Ceni y colocar el 1-1 en la pizarra.
La intensidad que brindaron en el primer tiempo disminuyó mucho para la parte complementaria, que se desarrolló en su mayoría en el medio campo, con un cuadro paulista que intentó pero que careció de la profundidad suficiente para producir el segundo tanto.
Mientras Guadalajara, sin apresurarse, soportó muy bien los intentos ofensivos del rival y en espera que un contragolpe le diera rumbo definitivo a las acciones. El Rebaño Sagrado abundó ayer en fórmulas para frenar el poder ofensivo de los brasileños con una dinámica rotación en las marcas y rápidas salidas en contragolpe.
Las malas noticias para Guadalajara son que este fue el último encuentro en el que pudo contar con el portero Oswaldo Sánchez, los defensas Carlos Salcido, Francisco Javier Rodríguez, Gonzalo Pineda, el mediocampista Ramón Morales y el delantero Omar Bravo, quienes deberán reportarse a la concentración de la selección mexicana.
