EL SIGLO DE TORREÓN
CD. LERDO, DGO.- Como David Rodríguez Govea fue identificada la persona que se ahogara en las aguas del río Nazas, luego de andar pescando a la altura del rancho Potrerillos, del ejido Sapioriz, en el lugar denominado Cañón de Fernández.
José Ángel Ordaz Ávila, vecino de Potrerillos, dice que cuando realizaba sus labores cerca del río, escuchó un grito pidiendo auxilio y vio a un hombre que manoteaba en forma desesperada.
El lugareño fue hacia su lancha pero tardó minutos valiosos en llegar y al final no pudo hacer nada por salvar al desconocido que se fue al fondo del río, ya sin vida.
Poco después llegaron los elementos de la DSPM y sacaron el cuerpo para llevarlo a la orilla del río y esperar la llegada del agente investigador del Ministerio Público de Delitos contra la Vida y la Salud Personal, Óscar Menchaca Lara.
Vestía pantalonera deportiva azul, camiseta blanca, otra del equipo de futbol del Santos y una sudadera color gris, además de una cachucha beisbolera con las letras Sox.
Para llegar al lugar de los hechos hay que recorrer, luego de llegar a Sapioriz, un sinuoso camino paralelo al río en una distancia de unos seis kilómetros, motivo por el cual se dificultó la llegada de las autoridades judiciales, que lo hicieron cerca de las 14:00 horas para dar fe.
Acudieron también, además de los preventivos municipales, elementos de la Policía Ministerial del Estado, Protección Civil Municipal y el agente del Ministerio Público, quien dispuso que el cadáver fuese trasladado al anfiteatro del Servicio Médico Forense (Semefo), de la Subprocuraduría de Justicia de la Región Laguna Durango.
Cuando ya se habían llevado el cadáver al anfiteatro para la necropsia de Ley, María Concepción Fernández Cordero, de 34 años y con domicilio en calzada Durango número 465 del fraccionamiento Santa Teresa, en Gómez Palacio, preguntó a los policías municipales por su esposo, con quien había llegado desde el lunes y el martes por la mañana fue a pescar, pero ya no lo vio.
La mujer dio las características del esposo a los policías y le informaron que habían encontrado una persona ahogada, por lo cual acudió a las instalaciones del Servicio Médico Forense (Semefo) para su identificación ante el agente investigador del Ministerio Público.
Le gustaba la pesca
María Concepción Fernández Cordero, esposa de David, declaró a las autoridades judiciales que a su esposo le gustaba mucho la pesca y había salido rumbo al río desde el lunes a bordo de su automóvil, donde pernoctaron esa noche, junto con su pequeña hija.
Por la mañana del martes, David salió temprano a pescar, pero pasaron las horas y no volvía, lo cual motivó que la mujer fuera al pueblo a solicitar auxilio para buscarlo, pero se encontró con la terrible noticia que se había ahogado.
Son ya cinco las personas ahogadas en el río Nazas en los meses de marzo y abril. La cifra podría aumentar a partir del mes entrante con la apertura de las compuertas de las presas Las Tórtolas y El Palmito.
