El Siglo de Durango
Durango importa entre diez y 12 kilos de carne por cada uno que logra exportar anualmente a Estados Unidos, reveló el diputado federal priista, Fernando Ulises Adame de León.
Ante tal desequilibrio de la balanza comercial, Adame consideró urgente un plan que modifique las inercias del sector ganadero local, de manera que deje de estar a expensas de los mercados extranjeros para poder vender su producción.
Aunado a ello, puntualizó que Durango envía su mejor carne hacia Estados Unidos, y de regreso, por cada kilo exportado se importan entre 10 y 16 kilos de carne de pésima calidad, cuyo destino en EU sería convertirla en alimento para aves.
?Nunca seremos competitivos mientras no transformemos nuestro producto aquí mismo en el país?, sentenció.
El legislador duranguense manifestó que la solución de los problemas por el veto fronterizo sería parcial, ya que la ganadería de Durango requiere un proyecto más ambicioso de introducción al mercado mexicano de las carnes finas para poder sobresalir.
Y frente a la mortandad que registra el ganado local por falta de agua, sobrepoblación e insuficiencia de pastizales, urgió a las instancias gubernamentales a poner en marcha un programa emergente para llevar agua, forrajes y pastura de inmediato, antes que la mortandad vaya en aumento a niveles más graves aún.
Reconoció que es grave la situación que atraviesan los productores duranguenses al enfrentarse al cierre de las fronteras desde el año 2005, sin embargo, dejó claro que es el momento propicio para contrarrestar la dependencia que tienen de los mercados de exportación.
?En cualquier momento se caen los precios internacionales y se vuelve a caer la producción. Por eso debemos apostarle al mercado interno?, puntualizó el ex secretario estatal de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural.
Argumentó: ?nosotros importamos hasta diez veces más de las carnes rojas que exportamos como país. Al año, México exporta un millón 300 mil cabezas de ganado, y Durango es el tercer exportador, con entre 120 y 200 mil cabezas. Pero como país y como estado importamos más carne de la que exportamos, hasta diez o doce veces más?.
Miembro de la Comisión de Desarrollo Rural de la Cámara de Diputados, Ulises Adame señaló que desde octubre de 2005 logró la aprobación de un punto de acuerdo para que se liberaran recursos del Fondo de Apoyo a Productores en Contingencias Climatológicas (Fapracc) a favor de varios estados, entre ellos Durango.
Sin embargo, dijo desconocer la razón por la que a la entidad duranguense no se le entregaron recursos del llamado Fapracc, a pesar de existir una solicitud formal de la Cámara de Diputados hacia la Sagarpa para tal efecto.
Se le preguntó si podría deberse a las diferencias políticas que ha mostrado el Gobierno del Estado con el nuevo delegado de Sagarpa en Durango, y dijo: ?sí me di cuenta de esos desencuentros, y pudo haber sido resultado de..., pero el Gobierno Federal ha perdido el interés por apoyar a la clase campesina?.
Continúa el veto
La crisis por el veto ganadero ha provocado pérdidas por más de 300 millones de pesos a la economía duranguense, en virtud de que se han dejado de exportar miles de cabezas de ganado, desde el cierre fronterizo que decretó Estados Unidos de Norteamérica en mayo de 2005.
En estos momentos, la Comisión Revisora del Departamento de Agricultura de Estados Unidos analiza si Durango atendió o no las observaciones que la Comisión Binacional EU-México hizo a los hatos y ranchos ganaderos, a fin de que puedan remediar las deficiencias en el manejo, alimentación, traslado y cuidados zoosanitarios.
Durango perdió su estatus de exportación pues se detectaron varios casos de ganado enaretado en Durango infectado de tuberculosis. Es el segundo episodio similar que atraviesa esta entidad en los últimos ocho años.
