EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Un alto porcentaje de las quejas que se presentan en contra del Instituto Mexicano del Seguro Social se debe a la falta de conocimiento por parte de la comunidad de los servicios que se prestan, por lo que muchas de estas inconformidades resultan improcedentes.
El delegado estatal del IMSS en Durango, Rogelio Alonso Vizcarra, dijo que tampoco hay una plena identificación de las áreas dentro del propio Instituto que son las encargadas de captar dichas inconformidades, debido a lo cual la población derechohabiente opta por recurrir a otras instancias, como los medios de comunicación cuando se trata de casos relacionados con mala prestación de los servicios médicos, principalmente.
Alonso Vizcarra señaló que aunque se tienen módulos de Atención al Derechohabiente, son pocos los usuarios que los conocen, por lo que primero se recurre a los medios masivos de comunicación, lo que lejos de ayudar en el esclarecimiento del supuesto mal servicio que es denunciado, retrasa todo el procedimiento porque el Instituto debe partir de cero para iniciar una investigación.
En la Subdelegación del IMSS de esta ciudad, se han recibido alrededor de 50 quejas en el transcurso de este año, es decir unas cinco cada mes, aunque sólo el 30 ó 40 por ciento de éstas han sido procedentes.
La mayoría de las inconformidades de la población derechohabiente, está relacionada con los trámites para el cobro de pensiones, la expedición de incapacidades médicas totales o temporales y otros aspectos que se derivan de la falta de conocimiento de la Ley del IMSS.
A este respecto, se indicó que dichos módulos atienden quejas que se pueden resolver en forma inmediata; otras de carácter derivado o que deben atenderse con el apoyo de funcionarios de diversas áreas del IMSS, así como otras que son turnadas a otras instancias.
Otras de las inconformidades se relacionan con la tardanza en la atención médica o la reprogramación de cirugías que ya tenían una fecha asignada.
El delegado estatal del IMSS consideró que en la medida en que exista un mayor conocimiento de los servicios, la ciudadanía estará en condiciones de exigir el cumplimiento de sus derechos y también de cumplir con sus obligaciones.