SILENCIO| HOY ES EL MOMENTO DE PEDIR AYUDA PROFESIONAL Y OLVIDARSE DE LA VERGÜENZA Y EL SECRETO.
La vergonzosa enfermedad que agrede la vida sexual de quien la padece: atletas de alto rendimiento, mujeres con partos múltiples, pero también quienes no han sido madres.
Esta es una enfermedad que causa mucha vergüenza a quien la padece, la limita en casi todas las actividades de su vida, y agrede de manera directa su vida sexual. De ella casi no se habla, se vive estóicamente en silencio, se trata por todos los medios de disimularla, de ocultarla. La incontinencia urinaria es una enfermedad de la que ya es tiempo de hablar en voz alta.
"Cualquier fuga involuntaria de orina puede considerarse incontinencia urinaria, comenta la doctora Adriana Dávila, bióloga de la reproducción, terapeuta de pareja y familia. Si la mujer se ríe, si baila, si estornuda y se moja, esa persona vive un verdadero infierno. Esta es una enfermedad que se calla, de la que no se habla porque es vergonzosa, porque a las mujeres y también a los hombres les da pena decir que se orinan y que no tienen control sobre esta función de su cuerpo."
¿Educación y resignación?
La educación que recibimos muchas mujeres durante los primeros años de nuestra vida, nos lleva a creer que llegará el momento en que dejaremos de disfrutar de nuestra sexualidad, porque una serie de factores se van a unir en nuestra contra para cancelarla y, lo más desastroso, se nos prepara para esperar ese momento con resignación.
Así, muchas incontinentes piensan que su vida sexual se acabó, incluso el pensamiento es reforzado por mediocres médicos que le aseguran que "ellas ya vivieron", que es el momento de "ocuparse de otras cosas" y dejar la sexualidad en el cajón de los recuerdos.
"Las mujeres que padecen incontinencia urinaria llegan a mi consulta porque son mujeres con depresión, afirmó la doctora Dávila. Mujeres que han dejado de hacer su vida normal y centran su atención en cómo disimular el padecimiento. Dejan de hacer vida social, se limitan a las actividades de casa, si por alguna razón se atreven a salir inmediatamente localizan el baño más cercano, se aíslan, en muchos casos sustituyen la alegría del color de su vestimenta por el negro, que es el tono que más disimula".
¿Hay factores que predisponen al padecimiento?
"Lo pueden padecer atletas de alto rendimiento (clavadistas, gimnastas), mujeres con partos múltiples, pero también quienes no han sido madres; personas con cistitis recurrentes, con partos difíciles, entre otros factores. A veces no importa la edad, hay mujeres jóvenes con incontinencia urinaria, pero esta enfermedad predomina en mujeres mayores de 40 años".
Grandes presupuestos para disimular
Uno de los principales objetivos de quien padece la incontinencia urinaria es tratar de que no se note. Las características de la orina, las lleva a enfrentar fuertes y desagradables olores, por lo que gastan grandes cantidades en desodorantes y jabones que les ayuden a disimular. Una señora afirmaba bañarse por lo menos dos veces al día, además de usar toallas sanitarias de manera permanente. "Siento que soy la única que sufro, la única con esta enfermedad. que vivo como escondida".
"Una de las formas de independizarnos, cuando somos pequeñas, dice la doctora Dávila, es precisamente en el momento en que tenemos control de nuestros esfínteres, cuando logramos el control sobre nuestro cuerpo, así que imagínate lo que significa retroceder en ese control. Es muy deprimente.
Remedio
Por eso, es muy importante difundir y comunicar a la población en general, que este mal tiene remedio. A
ctualmente se trata con fisioterapia y con medicamento, los dos al mismo tiempo. Sin olvidar que el apoyo terapéutico puede ser complementario."
Dicho de otra forma, es muy importante que en cuanto usted identifique las "primeras fugas de orina", se lo comunique a su médico (a) ginecólogo (a) o urólogo (a), para que usted pueda ser sujeta de una evaluación profesional.
Hay mujeres que han padecido esta incontinencia durante 10, 15 y hasta 28 años creyendo que "es el precio de la vejez", "el costo de haber sido madre", "la cruz que les tocó cargar".
Hoy, la industria químicofarmacéutica ha diseñado un buen número de productos que pueden facilitar la solución de este antiguo y doloroso problema. No importan cuánto tiempo haya transcurrido, no importa cuántos años ha vivido con este problema, hoy es el momento de pedir ayuda profesional y de olvidarse de la vergüenza y el secreto.
Recuperar la vida sexual
Para muchas personas es probable que la pareja se haya alejado,
que la vida sexual haya sufrido serios descalabros provocados
por esta situación, no se dé por vencida.
Una vez solucionado el problema principal, se puede recurrir a
la terapia sexual de pareja, a la búsqueda de soluciones que
puedan ayudar a recuperar el tiempo que no se empleó
correctamente. La edad no es un factor que determine la
cancelación de nuestra vida sexual, con 50, 60, 70, 80 y más
años, la sexualidad sigue siendo una muy grata compañía en
nuestras vidas, es la expresión de un corazón que late, de una
piel que vive.
No se trata de vivirla como cuando se tenían 20 años, sino de
aderezarla con la experiencia vivida, con las nuevas expresiones
que invente nuestra mente. La incontinencia urinaria no debe
cancelar nuestra vida social, ni laboral, ni mucho menos la
sexual.
Hoy sabemos que tienen solución y que hay que buscar al
profesional adecuado. Salga corriendo del consultorio de un
médico que le diga que "usted ya para qué", que "es el momento
de disfrutar de la calma", estas expresiones son una invitación
a morir un poco cada día, y la sexualidad es vida, mucha vida,
por eso estamos usted y yo aquí.