Agencias
MÉXICO, DF.- La nueva aerolínea de bajo costo mexicana, Volaris, donde participan el gigante de medios Televisa y el magnate Carlos Slim, comenzará a operar en marzo buscando repetir el éxito de algunas de sus pares europeas y estadounidenses en la segunda economía de América Latina.
Volaris ofrecerá inicialmente vuelos directos desde su sede en la ciudad de Toluca, vecina a la capital mexicana, a los principales destinos del país con tarifas que prometen ser hasta 40 por ciento más bajas que las de las aerolíneas tradicionales.
"Visualizamos como una gran oportunidad de inversión la creación de una línea aérea de bajo costo como (...) SouthWest, JetBlue, RyanAir, EasyJet", dijo el jueves Pedro Aspe, presidente del consejo de administración de Vuela Compañía de Aviación, en el evento de presentación de la aerolínea.
Con un capital inicial de 100 millones de dólares, Volaris entrará en un mercado en auge y deberá competir con otras líneas de bajo costo que comienzan a operar en los cielos mexicanos.
Vuela, la controladora de Volaris, es una alianza de cuatro socios al 25 por ciento: Televisa, SINCA Inbursa, unidad del Grupo Financiero Inbursa de Slim, la aerolínea Grupo TACA de El Salvador, y Discovery Americas I, un fondo de inversión operado por Protego -que maneja Aspe- y Discovery Capital.
La meta de Volaris es transportar en promedio 3,600 pasajeros diarios en viaje redondo, es decir 1.3 millones de clientes al cierre de su primer año de operación, sólo una pequeña porción de los 30 millones de mexicanos que se calcula viajan por año.
La aerolínea apuesta a seducir a nuevos clientes, sobre todo en el mercado que utiliza la red de autobuses para recorrer las vastas distancias del país.
"Gente que no volaba va a volar", dijo Aspe. "El crecimiento viene de ahí, por medio de tarifas bajas".
La aerolínea, que espera alcanzar la rentabilidad en el segundo año de operación, formalizó el jueves la compra de 16 aviones Airbus A319 de 144 asientos y la opción de arrendar o comprar 40 aeronaves más en el mediano plazo.
Volaris eligió como sede el aeropuerto de la ciudad de Toluca, como alternativa a las aerolíneas que operan desde el congestionado aeropuerto de la Ciudad de México.
Las aerolíneas de bajo costo operan con aviones nuevos que tienen menores costos de mantenimiento, utilizan aeropuertos alternos con tasas menores y no estacionan sus aeronaves más de 25 minutos para ahorrar costos de plataforma.
