EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- En su segundo intento por quitarse la vida, un interno del Centro de Readaptación Social (Cereso) se encajó una punta de alambre en el abdomen y requirió atención médica en el Hospital Universitario.
Sentenciado a seis años, cuatro meses y 15 días de prisión, Agustín Gil Muñoz, de 24 años, alias ?El Tin?, se ocasionó la herida de siete centímetros de longitud, cuando estaba en el baño de la celda número 18 del penal.
En la agencia del Ministerio Público (MP) de delitos contra la Vida y la Salud de las Personas, se informó sobre el intento de suicidio cometido por el interno que está en prisión desde el diez de enero de 2003, acusado de un delito de robo con violencia.
Ante el MP, Gil Muñoz dijo que tiene muchos problemas familiares y por eso está empeñado en quitarse la vida. La semana pasada se provocó una herida en la muñeca izquierda con una navaja de rasurar pero las lesiones las atendieron en la enfermería del Cereso.
El sujeto dijo que a las 21:30 horas ya estaba en su módulo y se metió al baño, y tras la cortina que brinda privacidad sacó el alambre puntiagudo y se hizo la herida, siendo descubierto por sus compañeros de celda que pidieron auxilio.
En el Cereso, el subdirector Jurídico, José Alejandro Sandoval Sotelo, informó sobre los hechos que Agustín Gil se lesionó a las 22:30 horas en el área de indiciados del penal y que un guardia de dio cuenta de lo ocurrido y llamó a la enfermería.
Sobre el interno se dijo que es calificado como problemático y de conductas violentas, por lo cual se encuentra recluido en un sector de internos especiales, aislado de los demás para no causar problemas.
La herida de Gil Muñoz no interesó tejidos y se presentó en el costado derecho del abdomen. El hombre está fuera de peligro y al MP le aseguró que no desistirá en su intento por quitarse la vida dentro del Cereso.
