RIESGOS | PREOCUPA AL GOBERNADOR SITUACIÓN DE LOS SAMPETRINOS.
EL SIGLO DE TORREÓN
Realizan medidas necesarias para prevenir la aparición de más casos al exterior del Cereso
SAN PEDRO, COAH.- La Secretaría de Salud (Ssa) está realizando las acciones necesarias para prevenir un posible brote de hepatitis C que afecte a la población de este municipio, luego que se tiene un serio problema al interior del Cereso, donde se mantiene un cerco sanitario.
Así lo anunció el gobernador Humberto Moreira Valdés, durante su reciente visita realizada a San Pedro, al ser cuestionado por El Siglo de Torreón, aseguró que ?la ciudadanía puede estar tranquila, puesto que ya se están tomando las medidas pertinentes para evitar que se presenten más casos de esta enfermedad en la población abierta?.
El ejecutivo estatal manifestó su preocupación porque esta enfermedad llegue a causar estragos más allá de los muros del Centro de Readaptación Social (Cereso), donde se mantiene un estricto cerco sanitario desde hace varios años cuando se detectaron varios internos portadores de este virus.
?Yo fui quien dio a conocer la situación que priva al interior del centro penitenciario y también anuncié las medidas sanitarias que se están llevando a cabo en forma permanente para evitar que más internos puedan contagiarse con este padecimiento?, aseveró el gobernador.
Señaló que por tal motivo se dieron las instrucciones necesarias al secretario de Salud en Coahuila, Raymundo Sebastián Verduzco Rosán, para que de inmediato las pusiera en práctica y prevenir que haya más casos de hepatitis C, ya no sólo al interior del penal, sino fuera de él.
?Estamos preocupados por la situación que se vive en este municipio, específicamente en el centro penitenciario y no dejaremos que esta enfermedad se propague a la población abierta, aunque de antemano sabemos que será una difícil labor, puesto que la mayoría de los enfermos se contagiaron al utilizar jeringas contaminadas, por ser adictos a las drogas?, dijo Moreira Valdés.
Fue el pasado mes de marzo del presente año cuando se conoció que 75 internos del Cereso de San Pedro se encuentran infectados con hepatitis C. Dos son mujeres y todos se mantienen dentro de un cerco sanitario establecido desde hace tiempo para evitar contagios.
La cifra anterior representa un 52 por ciento de la población conformada por 135 internos y se hizo hincapié en que el contagio fue en el exterior, ya que los enfermos manifestaron antecedentes tanto de promiscuidad sexual como de adicción a drogas heroicas para las que se utilizan jeringuillas.
El control sanitario se lleva a cabo desde 2002 cuando se detectaron los primeros casos de este padecimiento en dos de los reos, por lo que desde entonces a cada persona que es detenida y se le dicta auto de formal prisión primeramente es sujeta de revisión médica.
En forma periódica se realizan campañas de vacunación tanto en la población infectada como en la sana, con el objeto de prevenir cualquier brote al interior de la penitenciaría. Además a los enfermos se les brinda el tratamiento de control que consiste en vitaminas y una dieta balanceada, toda vez que no existe medicamento para combatir su padecimiento.
Las autoridades penitenciarias y de salud afirman que no existe razón para alarmarse por esta situación que se tiene al interior, toda vez que se están llevando a cabo las acciones correspondientes para mantener bajo control esta enfermedad.
En detalle
La hepatitis C es una enfermedad infectocontagiosa provocada por un virus que afecta directamente al hígado.
*Su evolución es crónica. En ocho o diez años provoca cirrosis o cáncer.
*Se transmite principalmente por contacto sexual, uso de jeringas contaminadas, transfusión sanguínea.
*El virus tiene un periodo de incubación de 15 a 180 días.
Síntomas:
*Decaimiento y fatiga.
*Ictericia (piel amarilla).
*Orina color amarillo oscuro.
*Heces descoloridas.
*Dolor en la región del hígado.
FUENTE: Investigación de El Siglo de Torreón
