EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- A un niño de seis años le aplicaron la vacuna Triple Viral pero hubo algún error de parte de la enfermera, porque al pequeño se le formó una ámpula y ahora tiene un agujero ya necrosado (se le está secando la piel) que tiende a crecer. La madre del niño interpuso denuncia ante el Ministerio Público para exigir su curación inmediata.
Aurelio Urbina Suárez, agente investigador del Ministerio Público de Delitos contra la Vida y la Salud Personal, informa que la querella la presenta Marisol Sonora Mendoza, de 25 años y con casa en calle Avelino M. Presa número diez de la colonia El Consuelo, de esta ciudad, madre de Pablo Gilberto Salazar Sonora.
Asienta en su denuncia que el 23 de agosto pasado, llegaron a su domicilio dos enfermeras del Centro de Salud y le aplicaron la vacuna al pequeño para la rubéola, sarampión y parotiditis (paperas), pero luego de vacunarlo, Marisol alcanzó a escuchar a la enfermera comentarle a la otra que se había equivocado.
El mismo día que le aplicaron la vacuna al pequeño, se le levantó una ámpula que le creció y después le reventó, comenzando un agujero en su brazo que poco a poco le crece.
A los tres días, llegó un médico de apellido Alvarado, que le dijo a la madre de Pablo Gilberto que iba también del Centro de Salud.
?Tiene suerte señora, su hijo fue seleccionado para darle seguimiento a las vacunas, como parte del trabajo de la Secretaría de Salud y lo vamos a revisar?, le dijo el médico a Marisol, que se extrañó por eso pero aprovechó para que le viera su brazo.
El pequeño Pablo Gilberto fue tratado unos días pero luego ya no volvieron y el agujero le supura y sigue creciendo, motivo por el cual la mujer decidió interponer la denuncia ante el Ministerio Público.
El agente investigador informa que ya giró un oficio al director del Centro de Salud para que le informe los nombres de las enfermeras y citarlas a declarar en torno a la denuncia, a fin de saber qué sucedió, pues se habla de que podría tratarse de otra vacuna o una dosis extra que le causó el daño y el pequeño no muestra mejoría, sino todo lo contrario.
Explicación médica
Armando Castillo González, médico legista de la Subprocuraduría de Justicia de la Región Laguna Durango, explica que el niño tiene ?una necrosis de forma circular de dos centímetros de diámetro localizada en tercio superior del brazo izquierdo.
?El niño requiere de un injerto, necesita curación diaria y cada 12 horas por personal calificado, con antibiótico y medicamentos que aceleren la cicatrización?, dice el legista.
La madre de Pablo Gilberto está muy angustiada por su pequeño y pide a las autoridades que exijan a la Secretaría de Salud enmiende su error.
