EL UNIVERSAL
MÉXICO, DF.- La Comisión Federal de Competencia (CFC) dio entrada a la denuncia de empresas de telefonía fija en contra de compañías celulares por presuntas prácticas monopólicas en la terminación de las llamadas generadas en las redes fijas, sobre todo por el nivel de las tarifas que les cobran para recibir llamadas de sus clientes.
Las telefónicas denunciantes, que también se han opuesto a la instrumentación de “el que llama paga” nacional e internacional, aseguran que las tarifas de interconexión que les cobran las firmas celulares para recibir las llamadas de sus clientes son elevadas y mayores a los costos.
Incluso, argumentan que las cuotas de interconexión que pagan a las empresas móviles son 11 veces mayores respecto a las tarifas que les pagan éstas a las telefónicas fijas por el mismo proceso de acceder a sus redes para terminar las llamadas.
Pero no sólo eso, sino que existe una discriminación, porque las móviles ofrecen a sus clientes tarifas muy por debajo que las que les cobran a las telefónicas fijas por la interconexión.
Las empresas que solicitaron la investigación a la CFC basaron su demanda en la propia resolución que emitió el órgano antimonopolio el 20 de abril de 2005, en la que concluye que hay indicios de discriminación o subsidios cruzados cuando las tarifas de interconexión que cobran las redes móviles son muy superiores a las tarifas más bajas que éstas aplican a sus clientes cuando hablan a otro usuario de la misma compañía.
Las denunciantes señalan que, en efecto, esta disparidad en las tarifas de interconexión genera que sus servicios sean más caros a sus suscriptores, pues tienen que incluir la alta cuota de interconexión que les cobran las redes móviles.
Su reclamo es que estas cuotas de interconexión deben ser menores a un peso para poder competir equitativamente, pues esto generaría que las tarifas al usuario final se reduzcan de manera considerable cuando llamen desde un teléfono fijo a un celular y que con ello los clientes tengan como una opción a las redes fijas para hacer sus llamadas de larga distancia hacia teléfonos celulares.
Esta denuncia ante la CFC forma parte de la estrategia emprendida por las empresas de telefonía fija Alestra, Axtel, Avantel, Maxcom y Marcatel en contra de la instrumentación de “el que llama paga” en larga distancia, esquema al que se oponen no por sí mismo, sino por las tarifas de interconexión que sus clientes paguen más por llamar a algún celular.
Esto generó que la entrada de este nuevo sistema tarifario sólo aplique, por el momento, para las llamadas que se hacen desde Telmex, Telnor y Bestel hacia teléfonos móviles, pues las celulares rechazan acordar tarifas de interconexión menores a un peso.
Adicional a esto, las inconformes también presentaron juicios de nulidad en contra del esquema, pero las autoridades judiciales ya rechazaron este recurso para el caso de Maxcom.
“El que llama paga” en larga distancia ya lleva casi un mes de operación y es aplicable sólo para quien llame desde teléfonos de Telmex, Telnor y Bestel, y cuando los clientes móviles reciben llamadas de otras ciudades provenientes de las telefónicas que no se adhirieron, tienen la opción de recibir la comunicación sabiendo que deberán pagar, o bien rechazarla para no asumir el costo.
