EFE
Londres.- La última película de James Bond, "Casino Royale", figura ya en el libro Guinness de los récords, pero no por una proeza del famoso agente secreto sino por una escena de acción de su vehículo, un Aston Martin.
En esa escena, el coche, conducido por un doble del actor que encarna a 007, el británico Daniel Craig, da hasta siete vueltas de campana, lo que constituye un récord mundial al volante.
El doble, llamado Adam Kirley, fue quien, gracias a su destreza, consiguió que el vehículo del famoso espía, propulsado por un cañón de nitrógeno, hiciera esas piruetas.
El récord anterior de seis vueltas lo había logrado el año pasado un actor que participó en el programa de motor de la televisión británica "Top Gear".
El coordinador de escenas de acción de "Casino Royale", Gary Powell, explicó que habían ensayado la escena varias veces usando coches de prueba, con un peso similar al Aston Martin, a unos 130 kilómetros por hora en una rampa.
"Eso funcionó muy bien, y los coches dieron hasta cinco vueltas en los ensayos", explicó.
Cuando se filmó la escena que aparecerá en la película, el experto conductor adaptó el experimento al peso y las condiciones del Aston Martin, logrando que, en lugar de cinco, diera esas siete vueltas sobre sí mismo que le han valido el récord, añadió Powell.