“La ambición es el último
refugio del fracaso”.
Oscar Wilde
No tengo ninguna duda que Víctor González Torrres obtendría un mayor porcentaje del voto que Patricia Mercado. El doctor Simi ha utilizado sus amplios recursos personales y los de su empresa para promoverse políticamente durante años. Ha señalado abiertamente que continuará haciendo lo mismo durante la campaña. En efecto, ha ofrecido ya un compromiso de invertir 100 millones de pesos para promover su candidatura. Y en un sistema de partidos que ha convertido el dinero en su ingrediente principal, esa oferta parece irresistible para algunos.
No sorprende que el supuesto sector “campesino” de Alternativa Socialdemócrata y Campesina haya encontrado esta oferta irresistible. Su apuesta por el partido fundado por Patricia Mercado y Alberto Begné no tenía nada que ver con un proyecto ideológico. Lo que buscaba el grupo encabezado por Ignacio Ydris Salomón era encontrar un partido que ya hubiera hecho toda la inversión en asambleas y registros necesaria para obtener el registro del IFE. No hay que olvidar que los partidos se han convertido en buena medida en un negocio.
El grupo de Ydris Salomón nunca mostró ningún entusiasmo por tener a Patricia Mercado como abanderada de su partido. Su propuesta, liberal en lo moral y socialdemócrata en lo económico, resulta poco apetecible para las grandes masas de nuestro país. Una vez que Ydris y sus seguidores tuvieron lo que buscaban, un lugar en el partido, empezaron a buscar un candidato que pudiera dar un mejor rendimiento en las urnas y, por lo tanto, preservar el negocio. González Torres representa en este sentido un candidato con muchas mayores posibilidades de rentabilidad que Patricia con sus ideas de, por ejemplo, defender los derechos de las minorías sexuales.
El gran punto que el IFE tendrá que decidir es si la reunión de Consejo Político que se llevó a cabo en Ciudad Valles, San Luis Potosí, la semana pasada, y en la que se desconoció la candidatura de Mercado y se postuló a González Torres, puede ser considerada legal. Ydris Salomón y sus aliados afirman que los consejeros socialdemócratas encabezados por el presidente del partido, Alberto Begné, simplemente no se presentaron a la reunión por lo que el consejo era legal con quienes sí acudieron a la cita. Sin embargo, Begné y sus consejeros, quienes hicieron el largo y complicado viaje a Ciudad Valles, afirman tener pruebas de que un grupo de golpeadores les impidieron entrar a la reunión.
González Torres ha sido ungido ya como candidato del otro grupo. Le tocará así al IFE decidir cuál de los dos es el abanderado real de Alternativa. La información disponible sugiere fuertemente que la reunión del Consejo Político en Ciudad Valles fue efectivamente ilegal. Cabe preguntarse, sin embargo, si hay pruebas documentales que permitan comprobarlo. Los consejeros del IFE, después de todo, tienen que tomar su decisión sobre la base de las pruebas que se les sometan. Y decidan lo que decidan, el caso terminará sin duda en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Quienquiera que sea el candidato de Alternativa, no hay duda de que no ganará la elección presidencial del próximo dos de julio. Si se trata de Patricia Mercado, de hecho, es muy probable que el partido ni siquiera logre el registro nacional. Ya Democracia Social con Gilberto Rincón Gallardo como candidato presidencial en 2000 y México Posible en 2003, con ideologías básicamente iguales a las de la Alternativa de Begné y Mercado, fallaron en sus intentos por conseguir los votos necesarios para lograr su registro definitivo. González Torres bien podría conseguir el registro pero ciertamente no la Presidencia.
¿Por qué entonces la insistencia en pelear por esa candidatura perdedora? Para Mercado y Begné, sin duda, este partido es una oportunidad por presentar ante los electores una opción política que los demás partidos no ofrecen. Por hicieron el esfuerzo enorme por fundarlo y conseguir su registro condicionado. Para González Torres, un millonario folclórico que ha sabido capitalizar la publicidad de su campaña política para promover sus empresas y su imagen personal, y que al mismo tiempo ha logrado que se apruebe legislación que conviene a sus negocios, tomar control de un partido es absolutamente indispensable para continuar con su gran estrategia.
La disputa por Alternativa nos demuestra mucho de lo que está mal con nuestro sistema electoral. Hemos permitido que los partidos se conviertan en monopolios y hemos creado barreras a la creación de partidos. Con ello hemos convertido a los partidos en un negocio perverso en que las ideas dejan de tener importancia.
Todo monopolio tiene un costo. Y el costo de darles a los partidos políticos el monopolio de acceso al poder lo estamos pagando ya. Y no hará más que elevarse en el futuro.
BACHELET
Michelle Bachelet, la candidata de la alianza gobernante entre el Partido Socialista y la Democracia Cristiana, ha ganado la Presidencia de Chile. No sorprende. Bachelet es una socialista, pero una socialista moderna. Ha ofrecido mantener las políticas de Ricardo Lagos y sus predecesores que han hecho de Chile la economía más dinámica de América Latina. A su actual ritmo de crecimiento, de hecho, Chile se convertirá en unos cinco años más en la primera economía desarrollada de Latinoamérica.
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