“Nada puede decepcionar más a un elector que votar por el candidato ganador”.
Mark B. Cohen
Todas las encuestas que se han publicado colocan a Andrés Manuel López Obrador en primer lugar en la contienda presidencial. Felipe Calderón afirma que hay dos encuestas que lo ponen a él en un empate virtual en primer lugar, una de Gaussc y otra de Arcop, pero sin conocerlas resulta imposible juzgarlas.
De manera que habrá que aceptar lo que nos dicen todas las demás, las cuales le dan al perredista el primer lugar seguido del panista Calderón y el priista Roberto Madrazo.
Es demasiado pronto, por supuesto, para que esto signifique algo. Cuando empezó la campaña de 2000 Roberto Labastida tenía, según la encuesta de Reforma, ocho puntos de ventaja sobre Vicente Fox; pero al final del camino el resultado fue exactamente al revés.
Un 15 por ciento o más de los electores hoy se muestran todavía indecisos. El número es suficiente para cambiar el rumbo de la elección en cualquier momento. Felipe Calderón es el menos conocido de los candidatos, lo cual es malo porque nadie vota por alguien que no identifica.
Pero también puede ser bueno, porque quizá aquellos que sí conocen a los otros candidatos y no se han sentido convencidos por ellos puedan inclinarse por uno que están por conocer. La última encuesta de Consulta Mitofsky arroja datos interesantes que explican por qué López Obrador se encuentra en primer lugar.
Los tres principales candidatos tienen en buena medida el voto duro de sus partidos, pero Andrés Manuel está atrayendo la atención de un grupo de independientes que en 2000 hicieron posible la derrota del PRI. El 35 por ciento de los electores que hace seis años sufragó por Fox dicen hoy que votarán por AMLO.
Son particularmente los jóvenes, que fueron clave de la victoria de Fox, los que hoy se inclinan por López Obrador. Este voto independiente es una de las razones de la ventaja que López Obrador tiene en la competencia. Por otra parte, 19 por ciento de los electores que en el 2000 votaron por Cárdenas “hoy no se inclinan por López Obrador”. Andrés Manuel parece estar captando voto independiente, pero perdiendo por lo menos algo del voto duro tradicional del PRD. La maquinaria electoral del PRI tiene fama de ser la más eficaz del país.
Y sin duda hay mucho de cierto en ello. A pesar de no encontrarse ya en Los Pinos, el PRI ha obtenido el triunfo en la mayoría de las elecciones estatales y municipales que se han llevado a cabo en los últimos años. Así como se habló, sin duda prematuramente, de la muerte del PRI tras la derrota de 2000, hoy muchos analistas se han visto obligados a reconocer un “renacimiento” de este partido.
El problema es que Madrazo no parece ser el mejor abanderado para mantener esa legendaria maquinaria electoral del PRI en la senda de la victoria. Madrazo es simplemente el candidato que más rechazo genera entre la población mexicana. Un 40 por ciento de los ciudadanos, según la encuesta de Consulta Mitofsky, rechaza a este candidato y nunca votaría por él. Esta cifra duplica a la de cualquier otro candidato.
Ésta es una de las razones por las cuales Madrazo no está alcanzando un porcentaje siquiera cercano al voto duro del PRI. Hasta este momento, según la encuesta de Reforma, Madrazo obtendría un voto efectivo (esto es, una vez eliminados los indecisos) de 26 por ciento. A lo largo de los últimos años el PRI ha demostrado tener un voto duro nacional de cuando menos 35 por ciento. La diferencia es sustancial.
Mucha gente que ha votado por el PRI en los últimos años simplemente no se siente a gusto con Madrazo. López Obrador no sólo está en primer lugar en la carrera sino que se ha fortalecido en el último mes. El ex jefe de Gobierno de la Ciudad de México ha sido, así, el ganador de la tregua navideña.
Lo curioso del caso es que fue él quien más protestó por esta pausa que, según decía, era un complot diseñado para afectar su candidatura. El panorama electoral cambiará sin duda en los próximos meses. El uso de los medios resultará crucial. Llama la atención que López Obrador haya contratado media hora de tiempo a las seis de la mañana con el canal 13 de TV Azteca. Calderón ha procurado estar disponible para todo tipo de entrevistas y ha iniciado de inmediato sus campañas de promoción en medios.
Madrazo, por el momento, se está manteniendo en mayor reserva. La experiencia nos dice que el o los debates entre los candidatos pueden ser cruciales en definir el voto de los electores. Pero habrá que ver si este año puede concretarse un debate. Es común que quien está en primer lugar haga todo lo posible para evitar la confrontación directa con sus rivales.
Habrá que ver si la experiencia se repite en esta primera campaña en la que, a estas alturas del juego, un candidato que no es del PRI encabeza las encuestas.
VIOLENCIA EN EL PRD
Un gran esfuerzo ha hecho el PRD para despojarse de la imagen violenta que tanto daño le hizo en el pasado. Pero el recurso a la violencia por el grupo Izquierda Democrática Nacional de René Bejarano contra el presidente del PRD en el D.F. Martí Batres ha revivido esta imagen. Los perredistas tienen razones para estar preocupados.
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