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Jaque mate/Topless

Sergio Sarmiento

El marco de referencia del

observador cambia con el tiempo, como un desnudo

de Rembrandt difiere de

un desnudo de Manet.

Arthur Koestler

Acapulco, Guerrero.- En este centro turístico un policía se encarga de recordar a las pocas bañistas, principalmente europeas, que se retiran el sostén que en México está prohibido que las mujeres exhiban su torso desnudo. Y digo mujeres, porque nadie se preocupa de que todos los hombres a su alrededor tengan el pecho al descubierto.

Éste es un ejemplo no sólo de un trato discriminatorio entre hombres y mujeres sino de cómo nuestro país se ha quedado atrás de una tendencia que se ha vuelto común en muchos países del mundo.

El bikini cumplirá 60 años este próximo cinco de julio. Esta prenda fue introducida en 1946 por el francés Louis Réard. Si bien tardó años en ser aceptada en nuestro país, en los años sesenta ayudó a impulsar la imagen de Acapulco en el mundo.

En 1967, por otra parte, la actriz francesa Brigitte Bardot se quitó por primera vez el sostén para asolearse topless en el balneario de Saint-Tropez, en la Riviera Francesa. Para la década de los ochenta la mayoría de las bañistas de cualquier edad en las playas europeas se asoleaba con el pecho desnudo al igual que los hombres. Pero al contrario de lo que ha ocurrido tantas veces, en este caso la moda europea no se ha extendido a nuestro país.

Dos razones lo han impedido. Una es una Ley mexicana que prohíbe el nudismo y lo interpreta de forma tal que se aplica a las mujeres que muestran el pecho pero no a los hombres. La otra es la agresividad de los hombres mexicanos hacia las mujeres que consideran demasiado atrevidas.

Las playas son federales, pero la legislación que prohíbe el nudismo no se aplica de la misma manera en todo el país. Lo que ocurre más bien es que prevalecen los usos y costumbres locales. En Playa del Carmen, Isla Mujeres y otras partes de la Riviera Maya, el topless es bastante común. Las mujeres europeas que acuden en gran número a esa zona simplemente se asolean de la misma manera en que lo hacen en sus países de origen: sin sostén. En Zipolite, Oaxaca, hombres y mujeres dan un paso más y con frecuencia se desnudan por completo. En Acapulco, por el contrario, los policías tienen instrucciones de pedir a las mujeres que se cubran el pecho.

La presión de los varones tiene su peso también. Es común que en México los hombres falten el respeto a las mujeres que se descubren el busto. Aun si no lo hacen, las miran de manera insistente y molesta. En un reciente fin de semana en Playa del Carmen, un grupo de trabajadores de la construcción pasó por lo menos siete veces frente a dos jovencitas que se asoleaban sin sostén en la arena. Pero éste es un problema que, me dicen, existía también en Europa cuando empezó a popularizarse el topless.

A veces la presión puede venir también de las mujeres. Recuerdo una ocasión que en la piscina de un hotel privado en Acapulco una señora mexicana le pidió a un agente de seguridad que ordenara a unas jóvenes españolas que se cubrieran el pecho porque “hay niños presentes”. Ninguno de los niños que pude ver, sin embargo, se mostraba ofendido. De hecho, tengo la impresión de que ninguno les prestaba mayor atención a las bañistas que tanto irritaron a la señora.

Quizá en medio de todos los problemas que tiene nuestro país el que se permita o no que las mujeres se muestren en público con el torso desnudo podría parecer poco relevante. Y lo es. La restricción, sin embargo, es un ejemplo más de cómo en México tomamos medidas que no sólo son discriminatorias sino que nos hacen daño en lo económico.

El que la prohibición de mostrar el pecho desnudo se aplique a las mujeres y no a los hombres es no sólo injusto sino quizá también inconstitucional. La aplicación inconsistente de la restricción genera, por otra parte, incertidumbre. ¿Por qué en Acapulco se prohíbe lo que se permite en Playa del Carmen y en Zipolite?

Hay razones para pensar que si adoptáramos una legislación más liberal podríamos aumentar los flujos turísticos. Si bien en Europa el topless predomina es común, en Estados Unidos se prohíbe en la mayoría de las playas. Si nosotros liberalizáramos nuestra legislación, daríamos a nuestras playas un atractivo adicional para los turistas de la Unión Americana.

La decisión de quitarse o no el sostén no debe ser del Gobierno sino de cada mujer en lo individual. En este año estamos celebrando el 60 aniversario del bikini que tanto ayudó a colocar a Acapulco y a México en el mapa turístico internacional. Pero el año que viene se cumplirán 40 años del día en que Brigitte Bardot se retiró el sostén del bikini en Saint-Tropez. Y en México seguimos prohibiéndoles a las mujeres que lo hagan, a pesar de que permitimos que los hombres se paseen con el torso desnudo en cualquier playa.

CONTIENDA CERRADA

Comienza a cerrarse una vez más la contienda. Las encuestas muestran un repunte de López Obrador y un debilitamiento de Calderón. Las autoridades electorales han retirado los anuncios agresivos del PAN pero no los del PRD. Y esta semana López Obrador hará un anuncio especial para favorecer a quienes ganen menos de nueve mil pesos mensuales. Parece que se acerca un final de fotografía.

Correo electrónico:

sarmiento.jaquemate@gmail.com

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