París, (EFE).- El nuevo satélite "Jason-2" permitirá poner en marcha una nueva misión para la observación de la circulación oceánica y estudiar así los cambios climáticos en virtud de un acuerdo entre europeos y estadounidenses, anunció el Centro Nacional de Estudios Espaciales de Francia (CNES).
El acuerdo para la puesta en marcha de esta misión, cuyo lanzamiento está previsto en 2008, lo firmaron por parte europea el CNES y Eumetsat y por parte de Estados Unidos la NASA y la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA), explicó la agencia francesa en un comunicado.
El "Jason-2" tomará medidas topográficas de la superficie de los océanos, transmitidas cada diez días, y permitirán analizar cambios en el régimen oceánico asociados a ciclos estacionales o plurianuales (como "El Niño"), las mareas o la elevación media del nivel del mar.
El satélite se situará en una órbita baja a 1,330 kilómetros de altura y estará equipado, entre otros instrumentos, con un radar altímetro, un radiómetro microondas y varios sistemas de orbito-grafía.
El responsable científico de la misión en el CNES, Yves Ménard, los datos que aporte el "Jason-2" se podrán utilizar en múltiples aplicaciones, como la previsión climática, la ayuda a la seguridad de bienes y personas, la asistencia a la navegación, el seguimiento de la trayectoria de manchas u objetos a la deriva, la gestión de los recursos marinos, la meteorología marina o la hidrología.
El "Jason-2" marcará la continuidad con las medidas efectuadas por el "Topex Poseidon" entre 1992 y 2005, y por el "Jason-1" desde 2001.