Dentro de las semifinales de la Copa Libertadores de América, el Sao Paulo de Brasil demostró su jerarquía y venció a domicilio a las Chivas Rayadas del Guadalajara en un partido cerrado, machacado, peleado en medio campo y decidido por un error de marca y percepción de la defensa rojiblanca.
El campeón defensor del certamen había perdido en dos ocasiones consecutivas frente al Rebaño; ambos juegos se dieron en el marco del grupo de calificación pero uno de ellos fue francamente doloroso para los paulistas pues les fue cortada una racha espectacular de años sin derrota en su casa, el Estadio Morumbí, y por lógica, el orgullo del gran cuadro brasileño estaba herido.
En voz de Rogerio Ceni, guardameta, capitán y goleador del Sao Paulo, se resumió el ánimo del club: ?no podemos perder tres veces seguidas ante Chivas?, y así encararon el compromiso.
Lo que vimos el miércoles en la cancha del Jalisco fue a un equipo diferente al de hace cuatro meses. Ahora fue un cuadro concentrado, aplicado, lleno de oficio y que casi no cae en distracciones cuando de marcar y meter la pierna se trata.
Fue tal el dominio paulista, no sólo en tener el balón sino de la situación general del partido, que logró enmudecer a los casi 60 mil aficionados que esperaban ver a su equipo hacer otra travesura.
Por el lado de Chivas, al contrario de lo visto ante Vélez Sarsfield, se careció de dinámica, variantes y actitud; la imagen repetida de un ?Bofo? Bautista recibiendo de espaldas y cayendo constantemente al césped reflejó la nula peligrosidad del grupo dirigido por José Manuel de la Torre.
Se dice que los equipos grandes se muestran en la adversidad y Guadalajara tiene una oportunidad de oro para demostrarlo cuando deba vencer a Sao Paulo el próximo dos de agosto allá en el mítico Morumbí.
El arbitraje del uruguayo Jorge Larrionda estuvo a la altura de esta instancia del torneo, pues las decisiones bravas fueron correctas.
Primero invalidó un gol anotado con la mano por Ricardo, asistido del cuarto oficial y cobró perfectamente el penal que un inocente ?Maza? Rodríguez cometió sobre un delantero paulista para que Rogerio, portero visitante, la mandara guardar en un monumento a la frialdad y al aplomo.
Chivas tiene vida y deberá mostrar su jerarquía. Calidad tiene, y de sobra.
Desde el punto de vista de la narración, este encuentro marcó el debut de Raúl Orvañanos con la cadena Fox Sports. Felicitaciones.
En otro asunto, se confirmó la contratación de Francisco Fonseca por el Benfica de Portugal; el ?Kikín? jugará en el popular cuadro lusitano los próximos tres años, donde espera que su pundonor lo saque adelante.
?Kikín? dista de ser un jugador elegante, de poseer una técnica depurada o la clase que lo encumbre como un referente importante en el ataque lisboeta pero todo esto lo suple con una voluntad de acero y un despliegue físico que le permite pelear a muerte cada pelota que disputa.
Sus más de 60 goles anotados con Pumas, Cruz Azul y la Selección Nacional avalan a este romperredes mexicano.
Ojalá no pierda la humildad.
Finalmente, parece que Omar Bravo y Jared Borgetti se alejan cada día más de la posibilidad de jugar con el Racing de Santander. Ni modo.