El Siglo de Torreón
MATAMOROS, COAH.- Espantosa sorpresa se llevó una madre luego de ver a uno de sus hijos colgando de una soga ayer por la mañana.
Como todos los días, Emilia Teresa Rodríguez Almaguen, de 43 años de edad y con domicilio en la avenida López Portillo 215 poniente de la colonia Mariano Matamoros, tocó la puerta de la recámara de su hijo, Juan Emilio Salazar Rodríguez, de 20 años, para que se fuera a trabajar.
La mujer al ver que no respondía a su llamado, decidió entrar para luego descubrir el cuerpo de Juan Emilio, colgando de una de las vigas de la habitación con una soga de color morado rodeando su cuello.
Con la esperanza de salvarlo, Emilia llamó a la sala de emergencias de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM) y a la Cruz Roja. Minutos después arribaron paramédicos de la institución y de la corporación policiaca. Pero ya era demasiado tarde, pues Juan Emilio ya tenía algunas horas de haber muerto.
De acuerdo con el reporte de la Policía Ministerial, quien también acudió al lugar de los hechos, la madre del hoy occiso mencionó que la noche anterior, Juan Emilio había discutido con su esposa, Nataly del Río Flores, de 17 años de edad, por lo cual ella decidió marcharse a casa de sus padres acompañada de su hijo, razón por la que entró en una ?profunda? depresión, por la que tal vez se vio orillado a tomar la decisión.
Fue el agente del Ministerio Público de Delitos Violentos de este municipio, Adolfo Ochoa García, quien ordenó el levantamiento del cadáver y el traslado del mismo al Servicio Médico Forense del Hospital Universitario en Torreón, para la práctica de la necropsia de Ley.
?Era buen muchacho?
De acuerdo con algunos del lugar, quienes no revelaron su identidad, mencionaron que Juan Emiliano, aunque no tenía mucha comunicación con las personas que lo rodeaban, se veía como un joven lleno de vida y con un futuro prometedor, ya que no le ocasionada disgusto alguno a su madre, con quien vivía acompañado de su joven esposa, Nataly del Río, de 17 años de edad.