EL SIGLO DE TORREÓN
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Por su voluntad no se fue... se la llevaron. La jovencita de Bermejillo reportada como desaparecida por sus padres desde abril pasado, aclara que estuvo secuestrada por el ex juez del Registro Civil de esa población, quien se la llevó a un rancho de Tamaulipas.
El miércoles 14 acudió a la Subprocuraduría de Justicia de la Región Laguna Durango, Alma Refugio, de 16 años y vecina de Bermejillo, para declarar que no estuvo secuestrada, sino que se fue por su voluntad con Adán Tamayo Murillo, 21 años mayor que ella y quien se desempeñaba como juez.
El 27 de abril pasado, Juan Manuel Palafox interpuso la denuncia ante la agente investigadora del Ministerio Público de Delitos Sexuales y Violencia Intrafamiliar, Adriana Samaniego Núñez, por la desaparición de su hija Alma Refugio.
El denunciante señala que a su hija se la había llevado Adán Tamayo Murillo, motivo por el cual solicitaba la colaboración de las autoridades para encontrar a la joven, a la que asegura se habían llevado con engaños.
?Todo lo que dije en el Ministerio Público fue porque me aconsejó un licenciado Mijares, amigo de Adán, cuando ya me trajeron de Tamaulipas?, dice la muchacha entrevistada por El Siglo de Torreón, y cuenta la historia.
El 22 de abril cuando salía de la escuela en la que estudiaba como cultora de belleza en esta ciudad, la esperaba Adán, quien le ofreció llevarla a Bermejillo, con el argumento de que quería hablar con ella, pero en lugar de eso se fue a Durango y le dijo que sólo sería de él.
Después de estar en Durango, Adán y Alma Refugio se fueron a Tamaulipas y llegaron al rancho El Granero, cerca de un pueblo Estación Manuel, donde estuvo secuestrada por seis semanas y sin poderse comunicar con sus familiares.
?Me dijeron que luego de que declarara me iba regresar con ellos, pero ya cuando vi a mis papás ya no quise regresar con ellos y Adán se quedó en el hotel de Torreón a esperarme?, cuenta la muchacha.
Alma Refugio dice temer estar embarazada, pues tuvo relaciones sexuales obligadas en varias ocasiones cuando estuvieron en El Granero (muestra la espalda con varios moretones y huellas de mordidas), pues no le gustaría tener un hijo de Adán.