Ann Arbor (Michigan) (EFE).- La incontinencia fecal (IF) se ha generalizado en mujeres estadounidenses que han tenido muchos hijos, partos con ayuda de fórceps o equipos de aspiración o que han sido sometidas a histerectomías, según un estudio.
El estudio, publicado por la Universidad de Michigan y realizado en coordinación con la de Washington, se centró en 6 mil mujeres de 30 a 90 años, aunque la condición también afecta a los hombres.
La investigación identifica por primera vez la depresión seria como uno de los factores de riesgo para la enfermedad, que consiste en la pérdida de heces líquidas o sólidas al menos una vez al mes.
En algunos casos la IF puede ser un factor que contribuye a la depresión.
La IF puede ocurrir cuando existen daños en los músculos del esfínter o cicatrices en el recto que impiden la retención de las heces.
Estas cicatrices pueden ser causadas por colitis ulcerosas, la enfermedad de Crohn y también otras condiciones, dice el estudio que se publica en el último número de "American Journal of Obstetrics and Gynecology".
Otro de los factores puede ser el alargamiento de los nervios que afectan al esfínter, lo cual puede ocurrir durante el parto, o por edad avanzada, traumas o alguna enfermedad como la diabetes que afecta al sistema nervioso.
La enfermedad de Crohn es una dolencia crónica en la que el sistema inmunológico del individuo ataca a su propio intestino produciendo inflamación.
Frecuentemente la parte afectada es el íleon o tramo final del intestino delgado, aunque la enfermedad puede aparecer en cualquier lugar del tracto digestivo.
El origen exacto de la enfermedad es desconocido, pero se sabe que hay factores de carácter genético y ambiental que aumentan el riesgo de padecerla.
"Debería darse mayor atención a esta condición debilitante (IF), especialmente si se considera el envejecimiento de nuestra población y los tratamientos disponibles contra esta incontinencia", dijo una de las autoras de la investigación, Dee E. Fenner, de la Universidad de Michigan.
"Es muy importante para la salud de la mujer que el personal clínico adquiera conciencia sobre lo generalizado de la IF para que puedan tratar a sus pacientes", indicó.
Según los expertos, por la naturaleza de esta condición, generalmente la gente que padece IF no habla con sus médicos sobre esto.
Los especialistas recomiendan al personal clínico adoptar un papel más activo en descubrir si sus pacientes padecen de IF, especialmente entre mujeres de 50 años o más.
Entre los tratamientos que pueden ayudar a la gente a manejar la incontinencia están la dieta y los ejercicios.