La "polipíldora" tendría como objetivo la reducción de los cuatro factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares: el colesterol, la alta presión sanguínea, los niveles elevados de homocisteína y la función de las plateletas sanguíneas, pero acaerrearía costos millonarios para un sistema de salud.
Londres, (EFE).- La administración como método preventivo y universal de una píldora que combine la aspirina con el ácido fólico y tres substancias contra la presión sanguínea salvaría miles de vidas, pero sería muy costosa para un sistema nacional de salud.
Esa es la conclusión de un estudio holandés que publica el diario "Journal of Epidemiology and Community Health", según el cual la llamada "polipíldora" podría agotar los recursos de cualquier sistema de salud a menos de que se administrase sólo a determinados grupos.
Los especialistas creen que si esa píldora se tomase a título preventivo, reduciría en un 88 por ciento el riesgo de cualquier enfermedad de las arterias coronarias y en un 80 por ciento el de apoplejías en las personas de entre 55 y 64 años.
Sin embargo, el informe holandés indica que incluso si la producción de la píldora no costase nada, su prescripción a millones de personas acarrearía gastos administrativos igualmente millonarios.
La denominada "polipíldora", propuesta por primera vez en el 2003, no ha sido experimentada hasta ahora en grandes números de pacientes, y no se sabe con exactitud cómo interactúan sus ingredientes.
Para calcular los costos potenciales, los autores del estudio analizaron el riesgo de desarrollo de enfermedades cardiovasculares en distintos grupos de edad, utilizando datos de un informe estadounidense en el que participaron 5.000 ciudadanos de entre 28 y 62 años.
El equipo del Centro Médico Erasmo, de Rotterdam (Holanda), llegó a la conclusión de que los mayores beneficiarios serían los ciudadanos de más de sesenta años con riesgo elevado de sufrir alguna enfermedad de tipo cardíaco.
La "polipíldora" tendría como objetivo la reducción de los cuatro factores de riesgo de las enfermedades cardiovasculares: el colesterol, la alta presión sanguínea, los niveles elevados de homocisteína y la función de las plateletas sanguíneas.
La estatina rebajaría los niveles del llamado colesterol malo, con lo que se limitarían los riesgos de enfermedad coronaria, mientras que las tres substancias que reducen la presión sanguínea disminuirían a su vez el peligro de apoplejía.
El ácido fólico disminuiría los niveles de homocisteína y, por tanto, la acumulación de placas grasas en las arterias, mientras que la aspirina regularía la función de las plateletas sanguíneas.
Según los científicos holandeses, la eventual administración de la "polipíldora" a quienes hubiesen cumplido los 60 años prevendría entre 76 y 179 ataques cardíacos por cada mil personas, y entre once y treinta apoplejías por cada mil personas.
