El Universal-AEE
MÉXICO, DF.- El dos de julio de 2000, Regina Orozco no tenía a un candidato favorito para ser el sucesor en la presidencia de Ernesto Zedillo Ponce de León. Incluso, balconeándose, como ella misma lo dijo, cantó para apoyar las campañas de los entonces precandidatos por el PRD y el Partido de la Rosa. Y es que la cantante, actriz y productora dijo que no estaba tan informada sobre las propuestas de los mencionados, como lo estuvo para la reciente jornada electoral de 2006.
La coyuntura política que vive México es histórica y Orozco se dice afortunada por haberle tocado vivir este momento donde Felipe Calderón Hinojosa (del PAN) es el candidato electo según el Instituto Federal Electoral (IFE); mientras que Andrés Manuel López Obrador (de la coalición Por el Bien de Todos) ha impugnado el resultado y promueve el conteo de ?voto por voto? en todas las casillas del país, después de una cerrada votación.
Si bien es una mujer que desborda en alegría y emoción cuando habla de su trabajo en obras de teatro como Muñequita de Pastel, o en cine con Los Pajarracos (a estrenarse el 28 de julio), la Megabizcocho, como sus amigos le dicen, ?explota? en pura pasión si de política se trata. No obstante, comentar sobre su hija Sol de María la convierte en una madre orgullosa al comprobar que como ella, ayuda a los más necesitados.
Sin embargo, Regina Orozco es más que eso, es una mujer que sigue en su proceso de autoconocimiento, el cual sabe que nunca termina; mientras, se da tiempo para leer y ver películas, además de emplear su gran humor y sarcasmo en la vida cotidiana.
-¿De dónde nace tu pasión por la política?
Esta pasión que siento es de ahora, antes no era así. Esta pasión nació el año pasado. Antes no entendía nada de política. Lo que estamos viviendo actualmente es histórico. También por muchos años trabajé, y quiero volver hacerlo, con gente indígena, con gente campesina y eso también me ha abierto, me ha sensibilizado más para saber que hay un México profundo que necesita que lo ayudemos.
-¿Qué opinas de la coyuntura política por la que atraviesa México?
Me gusta vivir esto, que me haya tocado. Me gusta participar en algo que sí creo que va a tener respuesta, porque antes, por ejemplo, y me voy a balconear, me invitaban a las marchas a cantar por alguien y no sentía lo mismo. Hace seis años yo estaba tan confundida que canté para Cárdenas y para el Partido de la Rosa, entonces yo no tenía una posición clara, porque no había tenido este entendimiento, esta entrega, pero tampoco sentía que podía hacer mucho.
-Decías que apoyas a López Obrador, ¿de qué manera?
He estado yendo a diferentes encuentros ciudadanos a los que ha convocado. Incluso llevamos una batucada. A mí lo que me gusta es la fuerza de toda la gente; la unión y el deseo de que haya claridad y respeto por los votos de todos los mexicanos. Me encantaría que ganara Andrés Manuel, pero también lo más importante es que la duda sobre el conteo de los votos en la elección se aclare. Si gana Calderón, pues así es. Si todos pudiéramos ceder un poco no habría problema, tanto el PRD como el PAN, para que todo esté un poco mejor.
-¿Por qué sí Andrés Manuel y por qué no Felipe Calderón?
Confío y le creo a Andrés Manuel. Confío en que es una persona honesta y capaz de combatir 70 años del PRI más seis del PAN. Aunque también sé que de llegar a ser presidente, seis años no son suficientes para arreglar todo. Con sólo verlo le creo porque me he estado informando; he estado leyendo varios periódicos al día y por supuesto también sobre otros partidos, no creas que no me importan.
-¿Crees en Fox, todavía como presidente?
No creo en Fox, es panista, porque han sucedido tantas cosas como lo de Atenco y Juárez; y lo de Chiapas sigue ahí, no pasa nada. Entonces dices bueno, ok, la economía ha estado estable de cierta manera, pero para quién. De ahí que ya no volví a votar por el PAN, porque la ultraderecha a mí me da mucho miedo. Yo trato de que haya los mismos derechos para todo el mundo, para los indígenas, los campesinos, los homosexuales, por ejemplo, cosas que creo un panista no respetaría.
-¿Te gustan los gobiernos paternalistas?
No, no estoy de acuerdo con que el gobierno te resuelva la vida y que la gente se siente a ver. O sea, también hay un límite para pedir, se trata de ?ayúdame con esto para que yo pueda hacer lo otro?; no se trata de que te solucionen la vida. Por eso, si gana Andrés Manuel no quiero que la gente vaya a pensar que es un gobierno paternalista, porque cada quien tiene que trabajar por lo que tiene que trabajar.
Si se da el ?voto por voto? y vuelve a perder López Obrador, ¿crees que acepte la derrota?
Aunque le cueste trabajo, yo creo que aceptará el resultado.
-Y si se queda el PAN con la Presidencia. ¿A dónde enfocarás tus energías de apoyo al PRD?
De todas maneras voy a seguir trabajando con la gente que pueda estar cerca de mí, como con mi trabajo dentro del teatro.
-¿Crees que importa más el color del Presidente que su compromiso?
Sí importa. Creo que la izquierda panista está más abierta a los intereses más comunes, a las necesidades de toda la raza, de todo el pueblo; están más aterrizados a la realidad de la mayoría.
-¿Qué le gusta leer a la Regina de estos días?
Acabo de terminar de leer un libro que se llama Seda (del italiano Alessandro Baricco). Es chiquitito, sencillísimo y precioso. Estoy leyendo El laberinto de la soledad. No lo había leído, estoy como que encontrando varias cosas ahí para un nuevo espectáculo, que trataría sobre el porqué yo nací en México. No creo poder decir más, porque me pueden robar la idea. Es sobre México, sobre yo como mexicana, pero hay más cosas.
-¿De qué más se ?empapa? Regina en su vida cotidiana?
Rento películas. Acabo de ver Alto riesgo (Crash); me encantó. A pesar de que dije ?¡ah, es con Sandra Bullock!?, me gustó mucho. No he ido mucho al cine. Quiero ir a ver Superman y Transamérica. (En cuanto a música) estoy oyendo de todo. Principalmente mucha música clásica porque mi hija va a entrar a estudiar clavecín. También estamos escuchando mucho piano y cosas vocales, po rque adora cantar. Imagínate escuchando a (Samuel) Barber a todo volumen. Ahora ella, Sol de María, de 15 años, está alfabetizando gente en Puebla.
-¿Me puedes comentar más al respecto?
A mí me ofrecieron la oportunidad de ir a alfabetizar, pero no pude, así que ella se animó y me habló para decir que está muy contenta. Estará más o menos una semana por allá.
-¿Qué nuevos proyectos tienes bajo la manga?
Al lado de Jesusa Rodríguez, Liliana Felipe y Roberto Cabral, haremos en septiembre la obra Noches árabes al pastor. La presentaremos en la sala Miguel Covarrubias. Es un espectáculo sobre Las mil y una noches, pero adaptado contra las homofobias, la educación sexual, el VIH y el uso del condón. Está muy divertida. Estaremos un mes en cartelera porque nos vamos de gira al interior de la República.
-¿Cómo se define la Regina de estos días?
Como una mujer que sigue en su proceso de autoconocimiento, el cual nos toma toda la vida. Así que desde hace un año y medio estoy haciendo mucho Tao y meditación taoísta. Es una gran disciplina, no es fácil. Hay cosas que el taoísmo dice que hagas, como por ejemplo mantener tu tierra, tus horarios, tus comidas, apapacharte, comer bien y quererte. Y todo eso cuesta trabajo por el ritmo de vida que tenemos
-Eres actriz, cantante y productora. ¿Qué te falta por hacer?
Hacer menos cosas pero más efectivas y con más dinero, para que mi trabajo llegue a más gente, para que se gane muy bien y todos sean bien compensados, esto, hablando sobre la producción teatral. También, como le digo a Aurorita, que lleva muchos años trabajando conmigo en la casa. Le digo ?ay Aurora, ¿te imaginas ser la primera dama?, más bien ¿la primera amante? Quiero ser amante de López Obrador?. Entonces ella me dice ?ay sí, así voy a ganar 60 mil pesos?.
