Ricardo La Volpe se ilusiona notablemente ante las posibilidades de la representación mexicana de trascender en la Copa del Mundo de Alemania 2006.
EL UNIVERSAL-AEE
"Este grupo fue armado para dejar huella y para hacer historia", dice el técnico nacional, y asegura que en el primer rubro ya se dio un paso importante.
"Cuando asumí la dirección técnica, dijimos a todos los jugadores y al cuerpo técnico que teníamos que dejar huella, hacer historia. Y la primera huella ya está lograda, al haber hoy un técnico que culmina un proceso, a pesar de que muchos, quizá 80% o 90% no lo creía; ahora, esa es ya una huella muy fuerte, porque al técnico que venga atrás se le podrá dar un trabajo de cuatro años", apunta La Volpe.
Y el timonel se entusiasma de manera especial cuando toca la parte futbolística, cuando habla del grupo, de los muchachos y sus cualidades, de esos hombres por los que optó para hacer frente a la aventura mundialista de Alemania 2006.
"Ahora bien, para hacer historia, por lo menos debemos llegar al quinto partido (cuartos de final), para ser mejores que los demás, para ser una Selección que deje algo. Ya después veremos hasta dónde se puede llegar, pero veo el compromiso con ilusión, porque si bien, algunos equipos pueden tener grandes individualidades, hoy México tiene un gran conjunto y buenos jugadores; tenemos dinámica, tenemos todo... Dios quiera que lleguemos al nivel futbolístico y mental que tuvimos en la Copa Confederaciones", agrega Ricardo La Volpe, al recordar una participación de la escuadra Tricolor que valió numerosos reconocomientos en el mundo antero, apenas el año pasado. Pero además del grupo, los hombres y la dinámica, el técnico muestra especial confianza en la capacidad del equipo para aplicar diferentes esquemas dependiendo el rival, lo que también obliga al ajuste de algunos hombres, "por eso, para mí, las características de los jugadores son muy importantes, y por eso hablo de perfiles... Quizá verán el cambio de dos o tres jugadores de un partido a otro".
