Jerusalén, (EFE).- Agricultores israelíes de granjas situadas al norte del mar Muerto han solicitado a la Fuerza Aérea que cancele los entrenamientos de sus pilotos de combate a ras del suelo por los daños que su ruido causa a las vacas y a las aves.
En su exhortación al jefe de la Fuerza Aérea, general Eliezer Shakdi, los agricultores indican que algunas vacas han abortado en sus establos por el miedo y que en los gallineros se han encontrado pollos que murieron por síncopes cardíacos, informa la prensa local.
"Comprendemos que es escaso el espacio que posee la Fuerza Aérea para sus entrenamientos pero se trata de un fenómeno que persiste desde hace tiempo y por eso le pedimos que los suspenda", dijo uno de los miembros del Consejo de los poblados rurales de esa zona.
El portavoz de las Fuerzas Armadas confirmó a los periódicos que el comandante recibió la carta de los agricultores y que después de analizar el problema les dará una respuesta.