El Universal-AEE
MÉXICO, DF.- La Plaza de Toros Monumental de Las Ventas de Madrid, con su tradicional Feria de San Isidro, cumple hoy sábado 75 años. Siempre temida, siempre respetada, tiene en su larga trayectoria una rica historia: triunfos clamorosos, fracasos estrepitosos, tragedias, escasas por fortuna, y es considerada la número uno en el universo de la apasionante profesión.
Un acontecimiento en que México figura desde que ofreció su primera corrida. Conformó el cartel inaugural el maestro Fermín Espinosa Saucedo ?Armillita?, de las grandes figuras de todos los tiempos.
El espectáculo taurino en la península adquiría una fortaleza tal, que era necesario la construcción de una plaza digna de Madrid, pues resultaba pequeño el coso ubicado en la Carretera de Aragón. Los terrenos designados fueron donados por la familia Jordán, que se situaban al final de la calle de Alcalá y que se conocían como Las Ventas del Espíritu Santo. A cambio de que los dueños del terreno -los Jordán- explotaran el espectáculo taurino durante 50 años. Su administración finalizó hasta 1978, o sea, 47 años. Hoy en día el coso es propiedad de la Comunidad de Madrid.
La construcción se inició en el año de 1919 bajo la batuta del arquitecto José Espeliús, dándole al coso un estilo clásico neomudéjar. Esta obra concluyó hasta una década después, 1929, tras la muerte de Espeliús, bajo la supervisión del arquitecto Manuel Muñoz Monasterio.
La magna plaza se inauguró el 17 de junio de 1931, figuraron como espadas Diego Mazquirán ?Fortuna?, Marcial Lalanda, Nicanor Villalta, Fausto Barajas, Luis Fuentes Bejarano, Vicente Barrera, el mexicano Fermín Espinosa ?Armillita? y Manuel Mejía Bienvenida. Toros de diversas ganaderías y ?Hortelano? de Juan Pedro Domecq, el primero. En su orden después saltaron bureles de los hierros de Julián Fernández, Manuel García, Viuda de Concha y Sierra, Graciliano Pérez Tabernero, Hijos de Andrés Coquilla, Conde de la Corte e Indalecio García, todos fueron obsequiados para tal acontecimiento. Hubo una pausa, los festejos se realizaban en la plaza de la Carretera de Aragón, hasta el 21 de octubre de 1934, en que se inauguró oficialmente la Monumental con Juan Belmonte.
, Marcial Lalanda y Joaquín Rodríguez ?Cagancho?, con toros de Carmen de Federico. Esa tarde el pasmo de Triana -Belmonte- cortó el primer rabo al burel ?Desertor?.
El 16 de junio de 1936 se cerró el coso por la guerra civil española y reabrió sus puertas el 26 de agosto de 1939, ya sin interrumpirse hasta la fecha, habiendo desfilado por su redondel todas las grandes figuras, españolas y extranjeras, del siglo XX y han escrito con letras de oro su historia en la famosa feria de San Isidro, la que creó en 1947 el empresario Livino Stuyck.
La Monumental de Las Ventas no ha sido un coso de mal fario, aunque las tragedias no pueden evitarse en un espectáculo como el taurino.
Fue en el año de 1935, antes del cierre del coso por la guerra civil, cuando cayó la primera víctima, un novillero, Félix Almagro. Actuaba junto con Mariano García y el sevillano Pepe Luis Vázquez, reses de Domingo Ortega. El cuarto novillo cogió a Almagro y le destrozó la yugular, muriendo en pocos minutos.
El primero y único matador, el sevillano Pascual Márquez. El tercer toro de ese festejo, 18 de mayo de 1941, ?Farolero? de la ganadería Concha y Sierra le dio una puñalada en el tórax partiéndole la pleura y dejando al descubierto el corazón. El óbito se suscitó el día 30 del mismo mes. Han muerto dos subalternos, el ?Coli?, al que cogió un novillo en 1964, y Antonio González ?Campeño?, un toro en 1988.