Regresan a la escuela 190 mil alumnos de educación básica en La Laguna de Coahuila
El Siglo de Torreón
Torreón, Coah.- Eunice no suelta la mano de su madre, no quiere quedarse en la escuela. Es la primera vez que está en una primaria y tiene miedo. Karla no deja de llorar ?le dije a mi mamá que no quería venir?, dice mientras se limpia las lágrimas.
En el primer día del ciclo escolar 2006-2007, 190 mil alumnos de educación básica de la Región Lagunera de Coahuila, regresaron a clases, además de casi siete mil maestros. Después del periodo vacacional, muchos niños acudieron contentos a la escuela, pero hubo otros que, entre lágrimas, suplicaban a sus madres: ?no me dejes aquí?.
Leticia Aragón Medina es madre de David, quien cursa el cuarto grado de primaria en la escuela Coahuila. ?Vamos bien tarde. Yo estoy muy contenta de que los niños regresen a clases porque por fin vamos a descansar nosotras, lo que pasa es que se ponen muy traviesos en las vacaciones y hay que darles sus nalgadas para que entiendan?.
Son las ocho con siete minutos, y Patricia peina a Melisa a las afueras de la escuela primaria Benito Juárez. Le pone un poco de gel en el cabello, luego una liga y listo. ?Es que venimos desde Gómez Palacio y había mucho tráfico. Eso que la niña se levantó temprano?.
Melisa Heredia Silva dice que ya estaba aburrida de estar en su casa, ?ya quería regresar a la escuela?, comenta mientras su madre termina de acomodarle el cabello, ?me levantaba como a las diez de la mañana y luego me ponía a ver la televisión?.
Por el altavoz, la directora avisa: ?pasen al patio a rendir los honores a la bandera?. En la fila del primer grado se encuentra Eunice Contreras. Su mamá, Alejandra Galván, le dice: ?hija suelta mi mano, fórmate con las demás niñas?, pero ella se la agarra más fuerte, ?es que no se quiere quedar, tiene miedo?, comenta la señora.
Mientras entonan el himno nacional, Karla Ibarra no deja de llorar. Sus ojos están hinchados y su cara enrojecida, ?le dije a mi mamá que no me cambiara de escuela y no me hizo caso, estaba en la Coahuila. No quiero estar aquí, me duele la cabeza y la panza, y luego cuando me pongo nerviosa me empiezan a salir ronchitas?.
Las madres de familia de las alumnas del primer grado se quedan a ver los honores. La escolta recorre el patio pero las órdenes de la capitana no son atendidas de manera correcta: ?qué hago?, le dice a una de sus maestras, mientras el resto de las niñas guardan silencio sin saber cómo reaccionar.
La directora vuelve a tomar el micrófono: ?paso redoblado con conversión a la izquierda, ya?, y la escolta logra terminar el recorrido por el patio de la escuela. Ellas también están nerviosas, es la primera vez que llevan la bandera.
Las maestras de la escuela están emocionadas. Rosa María Patiño tiene a su cargo el primer grado escolar, ?son la primera generación del Siglo XXI, y para nosotros es muy importante porque hemos luchado mucho para que las alumnas tengan una buena educación y esperamos que ellas puedan aprovechar al máximo todos los conocimientos?.
Vuelve el caos vial
En el regreso a clases, la Dirección de Tránsito y Vialidad destinó a 130 elementos para agilizar la circulación frente a varios centros escolares, quienes además tienen la obligación de garantizar la seguridad de los peatones.
Y es que los padres de familia, con el afán de dejar a sus hijos a la puerta de la escuela sin tener que bajarse del carro, incurren en diversas irregularidades que van en contra del reglamento de Tránsito y Vialidad.
El funcionario dijo que la Dirección de Tránsito y Vialidad no puede abarcar todas las escuelas de Torreón, ?el problema se agrava porque hay obras en proceso, y debido a esto tengo que destinar elementos a estos puntos; nosotros tratamos de darle prioridad a las arterias de mayor riesgo?.
Algunos de los puntos conflictivos son la confluencia del bulevar Revolución y Calzada Cuauhtémoc, Zacatecas e Independencia, Valdés Llano y bulevar Constitución, entre otras arterias de la ciudad de Torreón.
En Torreón, dijo, circulan diariamente 180 mil vehículos, de acuerdo al padrón registrado, además de 30 otras 30 mil unidades flotantes, ?es que muchas personas vienen a trabajar o a estudiar a Torreón, pero viven en Matamoros, Gómez Palacio, y otras ciudades aledañas?.
