EL SIGLO DE TORREÓN
TORREÓN, COAH.- La espera fue de dos horas y al fin ?apareció? el gobernador Humberto Moreira Valdés. En menos de tres minutos se emitió el mensaje virtual a los internos y sus familias, que ya mostraban desesperación en el evento donde fueron preliberados 46 internos del Centro de Readaptación Social (Cereso).
Desde las 9:45 horas llegaron al estacionamiento de la Policía Preventiva del Estado (PPE) los ahora ex internos del penal de Torreón y sus familias ya aguardaban en el salón de actos del edificio Coahuila. Una hora después los beneficiados subieron al recinto a esperar sentados el enlace desde Saltillo capital.
Las caras de alegría se observaban en las madres, esposas, hermanas e hijos que se dieron cita en el lugar y ansiaban estar con sus familiares próximos a recuperar su libertad. ?Mi hijo estuvo dentro ocho meses por un robo. Aquí está mi nieta esperándolo, ojalá que aprenda la lección?, dice Mayela Rodríguez.
Una niña de aproximadamente seis años no se pudo contener y corrió a abrazar a su padre que caminaba en la fila para tomar asiento junto con sus compañeros que eran custodiados por una decena de agentes. Como si fuera una graduación escolar, internos y familiares intercambiaban sonrisas, saludos y señales de victoria.
En diez casos, los internos lograron su libertad mediante el pago de una fianza que no había sido saldada por su desfavorable situación económica. ?Los pagos iban de los 800 a los mil 500 pesos. El Gobierno del Estado invirtió 31 mil pesos para liberarlo, sólo a los que no tuvieran antecedentes?, señala Guillermo Pimentel Tavizón, titular de la delegación regional de Defensa Jurídica Integral.
También en SP llega Santa Claus
Catorce internos del Cereso de San Pedro obtuvieron su preliberación, en lo que para ellos fue el mayor regalo que pudieron haber recibido porque podrán transcurrir las fiestas de fin de año en compañía de sus seres queridos.
Cuatro de ellos recibieron la preliberación como un beneficio que les concedió la dirección del centro penitenciario, mientras que los otros diez forman parte del programa de otorgamiento de fianzas por parte del Gobierno Estatal, el cual está dirigido a quienes cometieron delitos no graves y carecen de recursos económicos para el pago de las mismas.
Tras haber cubierto la fianza de estas personas, la Defensoría Jurídica Integral estableció el compromiso de estar al pendiente de cada proceso que suele seguirse cuando alguien obtiene su libertad mediante el pago de una fianza; la generalidad de quienes formaron parte de este programa cometió delitos como lesiones leves, robo o daños a propiedad ajena.
todas las alternativas posibles para la readaptación social de los internos de los centros penitenciarios en toda la entidad, y que el programa de preliberación mediante el pago de fianzas es uno de estos esfuerzos para tratar de apoyar a quienes tienen serios problemas de carácter económico. (Por María Elena Holguín)