EL PAÍS
BERLÍN, ALEMANIA.- Europa llevará ante el Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) el conflicto planteado por la decisión de Irán de reanudar su programa de investigación nuclear, del que se sospecha que tiene objetivos militares. Así lo decidieron en Berlín la llamada troika comunitaria (Alemania, Francia y Reino Unido) y el alto representante de la Unión Europea (UE), para la Política Exterior, Javier Solana.
Frank Walter Steinmeier, Philippe Douste-Blazy y Jack Straw, ministros de Exteriores, respectivamente, de Alemania, Francia y Reino Unido, países que llevaban dos años negociando con Irán en nombre de la UE, decidieron que el diálogo había terminado.
?Hoy hemos decidido informar al consejo de gobernadores de la Organización Internacional de la Energía Atómica (OIEA) de que nuestras conversaciones con Irán han llegado a un punto muerto?, declaró el ministro alemán. ?En vista del caso omiso que ha hecho Irán a los llamamientos del consejo de gobernadores de la OIEA y de la hasta ahora insuficiente cooperación de Irán en el esclarecimiento de cuestiones pendientes, ha llegado el momento de acudir al Consejo de Seguridad?, añadió Steinmeier.
Los ministros se esforzaron en dejar claro que Europa no se cierra a seguir negociando en un futuro. ?La posibilidad de retomar las conversaciones existe siempre y nosotros preferimos una solución negociada?, declaró Solana, que quiso acentuar el hecho de que esta decisión no se dirige contra la población iraní. ?No queremos negar a Irán su derecho a llevar a cabo un programa nuclear para fines civiles. Lo que no podemos aceptar es esta falta de claridad sobre los fines que persigue este programa?, subrayó Solana.
El anuncio de ayer supone la claudicación de la UE ante la dificultad de convencer a Irán para que abandone su programa de enriquecimiento de uranio. Los ministros europeos insistieron en poner de manifiesto la buena voluntad que han mostrado en la negociación frente a Irán.