El Siglo de Torreón
SAN PEDRO, COAH.- ?Soy cantante y compositor por necesidad... tuve que hacer esto para ganar dinero y poder criar a mi familia?, éstas son las primeras palabras que dice Chuy García, originario del ejido San Pablo, quien se dedica a cantar en los camiones suburbanos que utilizan los sampetrinos para trasladarse de una comunidad a otra.
La guitarra es su inseparable compañera de trabajo, este instrumento lo acompaña durante todo el día, cuando él se dedica a cantar canciones en los camiones para que a los pasajeros se les haga más llevadero el viaje, al final de sus actuaciones pide la cooperación voluntaria de la gente y así obtiene los ingresos para mantener a su familia.
Chuy García tiene 54 años de edad y los últimos 14 años los ha dedicado a ?vivir de la cantada?, él reconoce que la necesidad fue la que lo llevó a tomar su guitarra, un día decidió salir de su casa a cantar para obtener algo de dinero, con el paso de tiempo adoptó a ésta como su profesión.
?Yo era trabajador del campo, pero un día tuve un accidente y me lastimé un pie, después me hice comerciante ambulante, pero luego me hice cantante y aquí sigo trabajando... soy compositor por necesidad, compongo ranchero y bueno algunas canciones las descompongo porque no me gusta lo que dice la letra original?, dice.
El sampetrino de inmediato empieza a tocar una melodía y canta la que él dice que es su mejor canción, al terminar entona una parte de la canción que le compuso a los trabajadores maquileros que fallecieron en el accidente carretero a la altura del ejido Dolores hace varios años.
Sin importar las condiciones del clima, Chuy García siempre se despide de su esposa por las mañanas, toma con mucha seriedad su trabajo que le ha permitido mantener a sus nueve hijos, producto de sus dos matrimonios, con orgullo comenta que su hijo mayor tiene 33 años y la menor siete años.
Este cantante sólo trabaja en los camiones de pasajeros, dice que no le gusta cantar en las cantinas porque tenía muchos problemas, ?me peleaba con los borrachos que no querían pagar, se la pasaban pidiendo canciones y luego a la mera hora no me querían pagar, por eso me retiré de eso y mejor me dediqué a los camiones?. En un buen día sus ingresos pueden ser de 150 pesos diarios, un día malo recibe 70 pesos, ?ese día hay que economizar, pero lo bueno es que hay trabajo y que Dios siempre nos acompaña?, cuando llega el siguiente camión Chuy se despide, ?es hora de trabajar para sacar el pan?.