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Los equipos más limitados

Arturo Brizio Carter

Queridos amigos, reciban un afectuoso saludo desde tierras alemanas, concretamente desde Munich, Capital de Bavaria, donde se encuentra ubicado el Centro Internacional de Prensa, (IBC, por sus siglas en inglés) y que será la casa de la prensa mundial durante toda la Copa del Mundo.

El clima que ha recibido a los visitantes ha sido extremadamente frío, al grado de tener que andar, en pleno junio, totalmente abrigados y salir del hotel rumbo al centro de trabajo como chiles rellenos producto de tanto trapo y cobija.

El centro de prensa es una verdadera selva tecnológica, equipado con lo último en materia electrónica y desde el punto de vista cibernético, simplemente como estar dentro de una película de corte futurista.

La seguridad ocupa un punto fundamental en este Centro y lo será en todos los lugares que tengan algo que ver con el Mundial; es una verdadera pena que el terrorismo internacional con su falaz fanatismo haya sembrado el miedo en una de las más puras manifestaciones humanas como es el deporte, sobre todo el más jugado y visto en el mundo, el futbol.

Hemos encontrado en estos primeros días en Alemania a varias personalidades del balompié mundial y eso que los hoteles y el propio Centro de Prensa lucen apenas con un veinticinco por ciento de su ocupación; así, fue curioso encontrar conversando a Carlos Salvador Bilardo con nuestro compañero Juan Dosal, rivales en una final de la Copa Interamericana allá por los principios de los setentas entre el Toluca de México y el Estudiantes de la Plata de Argentina, partido en el que por cierto, Bilardo y compañía cosieron materialmente a patadas a los choriceros.

Estarán colaborando con nosotros y pudimos saludarlos y en algunos casos conocer a históricos como Bernard Schuster, cerebro de la selección alemana, del Real Madrid y el Barcelona, el finísimo mediocampista de Real Madrid y Milán, Fernando Redondo, nuestro pentapichichi Hugo Sánchez, el cañonero de la selección albiceleste y de la Florentina, Gabriel Omar Batistuta, así como el famoso Virrey Carlos Bianchi, de quien debo decir que es un perfecto caballero y siempre se muestra jovial y de excelente humor.

También hemos saludado a comentaristas de la llamada ?competencia? y que en realidad son viejos conocidos con quienes nos une el amor por el futbol y nos separan criterios comerciales pero siempre en la línea del absoluto respeto y ese rango ponemos a Luis García, Antonio Carlos Santos, ?Lupillo? Castañeda, Edgardo Codesal y por supuesto el poeta César Luis Menotti.

Sin embargo, hay una presencia sui generis que resulta perturbadora: se trata de Zllatko Petricevic, croata de nacimiento, avecindado en México y quien funge como espía de la selección de Irán. Este personaje jugó al futbol en su país natal y de alguna manera aterrizó en México dirigiendo a la Real Sociedad de Zacatecas de la Primera División A. Posteriormente bajo el mecenazgo de José Antonio García llegó a ser entrenador del Atlante, con escasa fortuna, para luego peregrinar por el sureste de nuestro país hasta sentar sus reales en Cancún, Quintana Roo, donde incluso construyó, con ayuda del Gobierno Estatal, un estadio que pretendía albergar un equipo de Primera División en ese bello destino turístico.

Pues aprovechando su paisanazgo con el técnico iraní se volvió ?oreja? y les pasa todo lo que sabe del Tricolor de cara al fundamental primer partido del Grupo D en esta Copa del Mundo.

Dicen que en la guerra y el amor todo se vale y el buen Petri le entra a San Juan bailando. Ojalá sea mal asesor.

La trivia de hoy: ¿En cuántos mundiales y en qué partidos ha jugado México el partido inaugural en Copa del Mundo?.

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