Ricardo La Volpe impone su estilo al equipo mexicano, de cara al Mundial de Alemania 2006.
ACAPULCO, GRO.- La selección mexicana de futbol inició ayer en este puerto su pretemporada con miras al Mundial de Alemania 2006. En la concentración más larga de la era La Volpe salen a la luz las preferencias del timonel y de su cuerpo técnico, así como las restricciones a los convocados.
¿Quién es el técnico al que admira Ricardo La Volpe? ¿Quién es el discípulo más avanzado y futuro entrenador entre los jugadores? ¿Quiénes no pueden dormir juntos y por qué? ¿Cuál es la razón de que no se pueda escuchar música en las concentraciones ni tener relaciones sexuales alrededor de los partidos?.
Muchas cosas se saben del tricolor, pero el cuerpo técnico y los jugadores guardan secretos sobre su convivencia, sus afinidades y sus gustos, que no son dados a compartir. Aquí te presentamos siete secretos de la selección nacional.
Que Ricardo La Volpe admira a César Luis Menotti no es novedad, pero supimos que en el seno de la selección se analiza y se sigue muy de cerca el trabajo del Chelsea del entrenador portugués José Mourinho, quien comparte con el técnico tricolor más cosas que el simple desenfreno verbal.
Además, el cuerpo técnico del equipo no es muy dado a establecer reglas estrictas para la convivencia entre los jugadores durante la concentración, aunque nunca habían encarado una tan larga como la que comenzó ayer con el accidentado viaje a este puerto.
Por ejemplo, están prohibidos los discos compactos y hay jugadores que no pueden compartir habitación por su gusto por el relajo. Además, supimos quién es el único de entre el cuerpo técnico al que sí escucha La Volpe. Y hay más...
1.- Mourinho. Ricardo La Volpe no es muy dado a admitir sus influencias y menos en cuestiones tácticas. Pero en su círculo cercano se sabe que el técnico actual al que más admira es José Mourinho, entrenador del Chelsea inglés.
A La Volpe le llena el ojo la forma en la que el portugués es capaz de modificar su esquema de juego a medio partido y sin realizar un solo cambio de jugadores. El técnico nacional mira por la televisión los encuentros del Chelsea cada que puede y los analiza con detenimiento.
La Volpe ha admitido que por poder contar con un equipo que pueda hacer eso, fue que llamó a tantos jugadores que se desempeñan bien en varias posiciones dentro del campo.
2.- Oswaldo. En el cuerpo técnico tricolor ven a Oswaldo Sánchez como un entrenador natural, y están seguros de que será en un futuro un fruto más de la escuela lavolpista de técnicos.
El portero del Guadalajara es el jugador que más se acerca al estratega para preguntarle por variantes, esquemas de juego y cuestiones tácticas.
La Volpe habla mucho con el portero, le dedica largos ratos de charla durante las prácticas; aunque eso en parte se debe a que el arquero es fundamental en la forma de jugar de la selección, no hay otro jugador con el que el técnico nacional dialogue tanto ni que pida tantas explicaciones sobre el porqué de las instrucciones que reciben durante las prácticas.
3.- Los compañeros de cuarto. La selección nacional no tiene una regla muy clara en cuanto a quiénes deben ser compañeros de cuarto durante las concentraciones, como sí ha ocurrido en el pasado, en otras concentraciones de cara a una Copa del Mundo.
Lo que el cuerpo técnico del tricolor ha promovido es que sean compañeros de cuarto los jugadores que desempeñan posiciones afines, para que exista mejor comunicación e integración entre ellos. Sin embargo, esta no es una regla estricta y la política interna durante las concentraciones es que los jugadores decidan y no se sientan invadidos en su intimidad, así que hay excepciones.
4.- Nadie contradice al jefe excepto... El integrante del cuerpo técnico al que Ricardo La Volpe escucha con más respeto es el preparador físico del equipo, Milton Graniolatti.
El técnico no sabe mucho de esa materia y tiene confianza en el uruguayo. Milton es el único que cuestiona abiertamente decisiones de La Volpe, cuando éstas tienen que ver con cuestiones físicas. Incluso es respetado cuando sugiere que algún jugador no participe en un partido porque no está listo físicamente.
El resto de los auxiliares se enfrentan a descalificaciones como ?¡tú no sabes de futbol!? cuando La Volpe no está de acuerdo en alguno de sus comentarios.
5.- Nada de fiesta. Por empeño de La Volpe, el tricolor tiene muchos jóvenes entre sus filas, y algunos son amantes del relajo, como Francisco ?Kikín? Fonseca y Omar Bravo.
El técnico respeta su alegría natural, pero para evitar que un día le hagan una fiesta en alguno de los cuartos, durante la concentración, hay un acuerdo entre el cuerpo técnico de que jugadores como esos dos nunca deben compartir habitación.
Lo que promueve La Volpe en esos casos es que un jugador de experiencia sea compañero de habitación de alguno de los jóvenes. Por ejemplo, el veteranazo Claudio Suárez es quien lleva la responsabilidad de apaciguar a Bravo, quien fuera su compañero en el Guadalajara.
6.- Ni sexo ni cds. Milton Graniolatti tiene una regla que no es muy popular ni está basada en algún estudio científico, pero quienes le rodean aseguran que funciona muy bien: 48 horas antes de cada partido el jugador no se debe distraer, así que nada de sexo ni música. De hecho, los seleccionados no pueden llevar discos compactos a las concentraciones.
Y eso no es todo, la regla de abstinencia sexual y musical se extiende también a las 48 horas después del partido, ya que alegan no debe haber un cambio drástico en cuanto a su manejo en tan poco tiempo. En compensación, hay días libres en los que los seleccionados pueden hacer lo que les dé la gana.
7.- Habrá descanso en el Mundial. Aunque todavía no están muy seguros de cómo lo van a hacer, en el caso de que México avance a la segunda ronda del Mundial, el cuerpo técnico analiza la posibilidad de darle cierto descanso al grupo antes de que dispute su duelo a los octavos de final, sobre todo para que exista la recuperación adecuada más mental que física.
Analizan si les dan días libres, aunque no tendrán mucho margen de maniobra debido a que no existe mucho tiempo entre el último partido de primera ronda y el de la segunda ronda.
Dependiendo de si el tricolor se clasifica como primero del grupo habrá cuatro días entre un juego y otro, mientras que se contará con tres si se avanza como sublíder. De ahí tendrá que tijeretear La Volpe, para dar tiempo a que el equipo saque la tensión de los primeros tres partidos.
Dieta rigurosa
-La dieta que recibirán los elementos del tricolor durante su estancia en Acapulco se basará en pasta, pescado y en menor cantidad carne roja y pollo.
-En cuanto a las bebidas, se hará una combinación de agua con suero oral para que los jugadores se rehidraten.
Fuente: José Luis Serrano, médico de la selección nacional
