El Siglo de Torreón
GÓMEZ PALACIO, DGO.- Risas nerviosas, silencios prolongados, verdades ?ocultas?... Margarita Gralia lucía radiante con su falda, saco y zapatillas en color rojo y blusa negra. A sus espaldas, dos esculturas de cuerpos desnudos de un hombre y una mujer armonizaban con el tema que iba a tratar: la sexualidad humana.
Tengamos el Sexo en Paz es más que un montaje escénico, es un monólogo donde la madura actriz expone de una manera valiente, de forma abierta y sin tapujos los temas sexuales que desde siempre han sido callados o reservados.
Por recato o desinterés, la razón exacta no se sabe, el caso es que el martes por la noche los laguneros no acudieron como se esperaba al Teatro Alberto M. Alvarado, incluso la primera función (de las 19:00 horas) tuvo que ser cancelada por falta de quórum mientras que la segunda (de las 21:00 horas) apenas si registró una entrada aproximada de 350 personas.
Aún así, Gralia ?se dio vuelo? exponiendo un tratado sobre la vida sexual de la actualidad, y tal como siempre, dueña del escenario hizo reflexionar al público al momento de cuestionar si el Sida es pecado, pero también logró arrancar las risas al pedir que el condón forme parte de la canasta básica, y sin IVA, pero lo más importante es que hizo entender a jóvenes y adultos lo importante que es conocer su cuerpo para así poder mantener una mejor relación con su pareja.
Con temple y dominio escénico, con elegancia y ritmo de comedia pero sin caer jamás en el mal gusto la actriz se convirtió en niña y pasó de adolescente a mujer para abordar desde su punto de vista femenino el sexo como problema cultural, y así abordó otros temas como la virginidad, el machismo, la menstruación, la primera vez, el aborto, la impotencia, el punto G y el orgasmo.
La gente sabía que Gralia tenía mucha razón en lo que estaba diciendo, sin embargo durante la plática quedó de manifiesto que la gente aún se cohíbe al hablar de sexo y peor aún, que existe mucha desinformación, sobre todo por la escasa comunicación que existe entre padres e hijos.
El tema del aborto no podía faltar; ya sin la risa pícara pero sí con semblante duro y preocupado, Margarita exhortó con voz fuerte ?por favor mujer, aprende a cuidarte, y hombres, no las embaracen irresponsablemente... nosotras no queremos abortos, necesitamos educación y eso no lo saben los políticos o los curas que son quienes no recriminan...?.
Las preguntas incómodas
A lo largo de su monólogo, Margarita Gralia hizo algunos cuestionamientos a los presentes.
-Uno de ellos fue ¿a qué edad empiezan los jóvenes a ser sexualmente activos?, a lo que los asistentes dijeron que entre 13 y 17 años.
-También preguntó que aquí en la región dónde es comúnmente donde hay exhibicionistas; La Alameda y el Bosque fueron los lugares señalados.
-Pero sin lugar a dudas dos de las preguntas qué más hizo pensar a las asistentes fue ¿qué es ser mujer? Y ¿cómo queremos ser? Ante esas, no hubo respuestas.