Nosotros Las palabras tienen la palabra VIBREMOS POSITIVO Eventos

Más Allá de las Palabras / PEREGRINACIÓN A TIERRA SANTA

Jacobo Zarzar Gidi

(Segunda parte)

Entre 1906 y 1907, mis abuelos maternos y paternos llegaron a tierras laguneras en busca de mejores condiciones de vida. Ellos fueron muy afortunados, porque nada les fue fácil. Comenzaron desde abajo; y cada día significó un reto que enfrentaron de acuerdo a sus posibilidades. Les tocó vivir escenas dolorosas de la Revolución Mexicana. Tuvieron momentos de alegría y también de tristeza como sucede en todas las familias, siempre acompañados de un trabajo agotador y de una lucha sin cuartel para poder sobrevivir. Cuando mi abuelo materno pudo instalarse en una tienda de ropa, sufrió varias veces el saqueo de su mercancía por las fuerzas revolucionarias. Molesto por esta situación que no le permitía avanzar ni sostener a su familia, tomó la difícil determinación de trasladarse a vivir con la abuela y sus hijos a la ciudad texana de Eagle Pass. Al poco tiempo una crecida del Río Bravo inundó su tienda que acababa de tomar en renta y perdió todo lo que tenía. De nueva cuenta regresa a Torreón. Mi padre me platicó que en cierta ocasión varios comerciantes de aquel tiempo fueron secuestrados por órdenes del general Francisco Villa en el Casino de La Laguna que se encuentra frente a la Plaza de Armas. No se les permitió salir hasta que cada familia entregara una determinada cantidad de dinero para sostener la revolución. Mi padre -que se encontraba entre ellos, pagó $10,000 pesos oro, que eran sus ahorros de varios años de trabajo, y consiguió su libertad. Años después leyeron en los periódicos las noticias terribles que llegaban de ultramar referentes a la Primera y a la Segunda Guerra Mundial. Pero, con toda seguridad lo que más le dolió a mi padre fue escuchar en su viejo radio de onda corta -que a veces a golpes hacíamos tocar, las noticias referentes a la injusta partición de Palestina (1948). Tal vez, como consecuencia de todo lo que vivieron -incluida la muerte de dos de mis hermanitas debido a la incipiente medicina de los años treinta, a mi madre le escuché varias veces decir: ?Ádra Míriem?, ?Ádra Míriem? (Virgen María), (Virgen María), y a mi padre: ¡Al-lah-u-akbar! (¡Dios es grande!). A pesar de todo, tuvieron fortaleza -que no sé de dónde la sacaron, para soportar tantos problemas que les aquejaron. Conservaron las costumbres que recibieron de sus antepasados, y supieron transmitirlas a sus descendientes. Amaron a México que fue su patria adoptiva y se encariñaron con su gente. Cuando dejaron este mundo, nos pareció muy corto el tiempo que pasaron entre nosotros, pero ya habían cumplido su misión lo mejor que pudieron. Ahora a nosotros nos corresponde intentar igualar su fe, su fortaleza y también su esperanza.

Un siglo después de aquella fecha memorable en que mis padres llegaron de Palestina, recibí una amable invitación para llevar a cabo una peregrinación a Tierra Santa. Es bueno recordar que mis padres y mis abuelos siempre quisieron volver aunque fuera por una sola vez antes de morir al sitio que los vio nacer. A ese lugar sagrado donde una noche memorable naciera el Salvador del mundo que vino a redimirnos del pecado, pero, por un motivo u otro, no les fue posible; la vida transcurrió demasiado pronto y la edad se les vino encima. Yo también llegué a desear hacer ese viaje en repetidas ocasiones, pero eran muchos los sentimientos encontrados que tenía en mi mente, -sobre todo por la ocupación israelí -a base de terrorismo- en territorios palestinos, que obligaron a sus habitantes a desplazarse a campos de refugiados para después usurpar sus tierras; pero, al darme cuenta que se cumplían cien años de aquella vez en que mis padres hicieron la travesía con tanto sacrificio de Belén a México, no lo pensé dos veces, me dejé llevar y dije que sí. Se trataba de un viaje organizado por los sacerdotes Legionarios de Cristo e integrado por 22 personas que en su mayoría pertenecen al movimiento ?Regnum Christi?. Cuando llegó la fecha de iniciar el viaje, salimos una mañana rumbo a Houston; y posteriormente en un vuelo de casi nueve horas, con 500 pasajeros abordo aterrizamos en Francfort. De esa ciudad alemana en la cual hicimos escala, volamos a Estambul (antigua Bizancio y Constantinopla -llamada así por haber sido la ciudad de Constantino) (antigua capital del imperio Otomano hasta l923, en que la capitalidad de Turquía pasó a Ankara). Con una temperatura de ocho grados centígrados arriba de cero, y bastante humedad en el ambiente que nos hizo temblar de frío en repetidas ocasiones, fuimos conducidos al hotel, por nuestro guía el señor Kamil Güller que habla perfectamente el español. Al estar aquí recordé que los turcos establecieron el imperio otomano que duró más de cuatrocientos años y que tenía posesiones en Europa, Asia y África. Únicamente en Estambul circulan tres millones de automóviles y es tan complicado manejar, que muchos taxistas no quieren llevar pasajeros a las calles más céntricas de la ciudad que actualmente cuenta con más de ocho millones de habitantes. En el año 1923 se proclamó la República Turca. Con Mustafá Kemal, llamado más tarde Atatúrk, Turquía entró de lleno a la modernidad, prohibió la poligamia, legisló para que la mujer pudiera votar, declaró laica la enseñanza, el Islam dejó de ser la religión oficial del Estado, adoptó el calendario europeo y el sistema métrico decimal, cambió los signos -tipo arábigo, del abecedario turco que se escribían de derecha a izquierda, por letras latinas que se escriben de izquierda a derecha. La lengua oficial es el turco y la mayoría de la población es musulmana. En la actualidad Turquía lleva una buena relación con Europa y con los Estados Unidos, lo cual ha ocasionado que su economía progrese más que la de los países circundantes. Una parte de Estambul se encuentra en Europa y la otra en Asia. La tierra antigua llamada Asia Menor o Anatolia es actualmente Turquía. Numerosos nombres de ciudades de diversas partes del mundo, tales como Filadelfia, París, Antioquía y Troya, así como también la palabra Europa, son originarios de Anatolia (Turquía) de donde era el rey Midas. El Monte Ararat está en Anatolia donde según la tradición se posó el Arca de Noé. Los primeros cristianos que escapaban de la persecución romana se refugiaron en Capadocia. San Pablo nació en Tarso (sur de Turquía), llevó a cabo la mayor parte de su apostolado entre los cristianos de Anatolia y gran parte de sus epístolas bíblicas fueron dirigidas a éstos. San Nicolás, conocido actualmente como Santa Claus, nació y vivió como Obispo de Myra en Demre (según la leyenda, donaba secretamente el ajuar a las hijas de los ciudadanos más desfavorecidos. Esto dio lugar a la costumbre de hacer regalos en la víspera de la fiesta de San Nicolás, una tradición que se trasladó posteriormente al Día de la Navidad). En Turquía, Alejandro Magno cortó el ?nudo gordiano? en las cercanías de Ankara. Al nudo doble de las alfombras turcas se le llama también ?nudo gordiano?.

Estambul es una hermosa ciudad situada a ambos lados del Bósforo junto al mar de mármara (mar de mármol) en la cual se puede escuchar diariamente a los ?mujaidines? llamar a la oración desde los minaretes que se elevan al cielo en cada mezquita. Las plegarias se rezan cinco veces al día con potentes magnavoces. Su horario es el siguiente: cinco de la mañana, 1:00, 4:00 y 6:30 de la tarde, así como también 8:30 de la noche. Sus atardeceres son preciosos, sobre todo si se dibuja en el horizonte alguna de las muchas mezquitas que tiene la ciudad. Por doquier observamos árboles de almendra, ciruela y durazno en floración que engalanan con su aroma los jardines. El número de especies de flores en Turquía es aproximadamente de nueve mil, de las que tres mil son endémicas. El 12 por ciento de sus habitantes no tiene trabajo. La economía se beneficia del turismo, de los productos del campo que actualmente invaden Europa -sobre todo España, y del comercio (ellos exportan automóviles, tractores y maquinaria industrial, material eléctrico, alfombras, pieles y cueros). Su moneda es la lira turca (100 liras turcas compran 65 dólares), pero la moneda más frecuente es el euro (el problema está ?en el redondeo?, porque al hacer un pago, el que lo recibe tiene la costumbre de quedarse con el cambio sin pedir permiso, supuestamente para facilitar la transacción). Unicamente los hoteles de cinco estrellas tienen casinos, pero no permiten entrar a los ciudadanos turcos para proteger su economía. Por las calles se venden perfumes de diferentes marcas con frascos y empaques originales, pero existe el riesgo de que al abrir las botellas, únicamente encontremos agua.

Entre 50 mil y 100 mil personas visitan diariamente El Gran Bazar. Se trata de un enorme y bello comercio techado, con mayor atractivo que un ?mall? y que tiene más de 650 años de antigüedad, en el cual se vende una gran cantidad de artículos nacionales e importados a un precio muy bajo entre los que destacan: manteles, chamarras y pashminas (chales) de la India y de Paquistán, joyas y pulseras de oro de 22 kilates, faroles orientales, alfombras, cámaras, pistolas antiguas y otros objetos del siglo antepasado, así como también miles de artículos más que atraen a turistas que provienen de diferentes partes del mundo. Esta construcción tiene 16 puertas, y sus tres mil 600 pequeñas tiendas son atendidas por diez mil vendedores que intentan a como dé lugar ganarse a los clientes que ingresan al recinto. Muy cerca de allí se encuentra El Bazar de las Especies que vende como su nombre lo indica una gran cantidad de granos y dulces orientales. Lo sorprendente de estos dos lugares es la limpieza del lugar y el orden de la mercancía que en todo momento se ve como si acabara de llegar a las vitrinas.

Estambul alberga el histórico edificio de la Estación Ferroviaria de Sirkeci, que era la última parada del ?Expreso de Oriente?, rey de trenes y tren de reyes, que hizo el trayecto entre París y Estambul desde 1833 hasta 1977, y en el cual se filmaron varias películas de misterio.

CONTINUARÁ EL PRÓXIMO DOMINGO

zarzar@prodigy.net.mx

jacobozarzar@yahoo.com

Leer más de Nosotros

Escrito en:

Comentar esta noticia -

Noticias relacionadas

Siglo Plus

+ Más leídas de Nosotros

LECTURAS ANTERIORES

Fotografías más vistas

Videos más vistos semana

Clasificados

ID: 212971

elsiglo.mx