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MÉXICO, DF.- El ex subsecretario de Relaciones Exteriores Andrés Rozental Gutman aseguró que el Gobierno de México ya hizo lo necesario sobre la reforma migratoria en Estados Unidos y advirtió que quienes quieren una respuesta más enérgica responden a motivos electorales.
En entrevista, el también ex representante de México ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) indicó que la reforma migratoria en Estados Unidos es una decisión soberana y el Gobierno de México no puede hacer nada al respecto.
Lo que sí se puede hacer ya se hizo, es decir, manifestar las dudas por las medidas anunciadas por el presidente George W. Bush y luego esperar los resultados de la negociación en el Congreso de Estados Unidos, donde todavía las cosas no están claras.
?Pero siempre hay quienes se quieren envolver en la bandera tricolor y lanzarse desde el Castillo de Chapultepec?, exigiendo respuestas más enérgicas, señaló el diplomático, al advertir que esa demanda se basa en motivos electorales.
Mi visión, dijo Rozental Gutman, es que todavía no está muy claro lo que decidirá el Congreso de Estados Unidos quizá esta misma semana, porque de la primera propuesta de permitir 400 mil trabajadores temporales, ahora el número se ha reducido a 200 mil, lo cual no resuelve la migración ilegal.
Además, aunado a la ?lamentable decisión? de erigir el muro y mandar a la Guardia Nacional, en la Cámara de Representantes de Estados Unidos hay sólo una propuesta en materia de seguridad y no de regularización, que es lo importante para los mexicanos.
?Lo que México y su Cancillería pueden hacer en este momento, ya lo hicieron, es decir, manifestar sus dudas respecto a los planes de Estados Unidos y cuidar, hasta donde sea posible, los derechos de los migrantes mexicanos más allá de su estatus legal?.
En ese sentido, señaló que quienes quieren una respuesta más ríspida olvidan que se trata de decisiones soberanas del país del norte y que los gobiernos mexicanos, no sólo el actual sino los anteriores, han dejado pendiente su tarea de generar empleos que inhiban la emigración ilegal.
Recomendó a la diplomacia y la clase política mexicanas esperar a que los estadounidenses decidan sus estrategias y luego tomar las medidas pertinentes, pero siempre reconociendo el derecho soberano de E
